Parecía una broma cuando la joven que se cruzó en mi camino en los primeros pasillos del Palacio de Encanto me decía algo así como “ni corra, porque ya pasaron para las 12, después del partido, la comparecencia”, mientras me señalaba hacia la entrada inferior al recinto legislativo: una pantalla anunciando casi el inicio del segundo tiempo entre México y Polonia…
* Son las 4:20 de la mañana… a esa hora ni recuerdo quién iba a jugar, pero sabía que había partido. Prendo la tele (no sé si sea arcaico decir Tele… ¿debí escribir pantalla?) y Argentina ya va ganando 1-0 a Arabia Saudita. Acabé de ver el primer tiempo en la cama y el resto en la cocina gritándole a la Mujer el empate y el gol de la diferencia, recordando cuando otro equipo africano, en el primer partido, le ganó a Argentina: Camerún, con un increíble salto de Francoise Omam Biyik. Las nalgas del camerunés estaban arriba de la cabeza de Roberto Sensini, el defensor albiceleste. Por eso, cuando escuché en el Congreso los comentarios de la derrota de Argentina, sólo disfruté del recuerdo ése en Italia 1990.
* Hablando de la tierra del tango: ¿Si Eric Cisneros Burgos es boludo, entonces es argentino?
* No vi el segundo tiempo en sí… me concentré más en ver las reacciones de la gente en el partido, en especial la del secretario de Seguridad Pública, Cuauhtémoc Zúñiga, quien había prorrogado su comparecencia a las 12 para que el Poder Legislativo pudiera ver el partido de México… estuvo acompañado de los diputados Juan Javier Cazarín Gómez y Roberto San Román Solana; el primero, el Jucopo; el segundo, encabezando la Comisión de Seguridad Pública.
Por cierto, dijo El Carón que la idea de ver el partido fue de la mayoría de los diputados aunque no especificó si cada quien en su oficina o en su casa, porque en el patio legislativo, donde estaba la pantalla, nomás estaban los citados, Toño Luna, Sergio Guzmán Ricárdez, Lulú Juárez Lara, Lidia Mezhua y Magaly Armenta…
* De cierto modo, en muchas oficinas y si me apuran hasta escuelas así como en muchas casas, dos horas se detuvo el tiempo para ver a la selección mexicana… por ejemplo, en el Puerto jarocho, en el zócalo, fue un hitazo, no perdón, un golazo de Paty Lobeira, poner una pantalla que no sólo congregó gente, sino emociones en lo que fue el momento más catártico del encuentro: la parada de Memo Ochoa… ¡hubieran visto la cara de Cuautémoc Zúñiga! En ese instante, yo no sabía si el guardameta había atajado el balón o simplemente Lewandowski la había volado… lo que sí sabía, por la expresión del secretario de Seguridad Pública, es que no había sido gol. Por cierto, los contrastes: mientras la emoción abofeteaba el rostro del Cuau, la del Carón estaba sobrada, como diciendo: “Tenemos portero”.
* Memo Ochoa fue el héroe que vino a borrar de un plumazo el luto mañanero por el deceso de Pablo Milanés… después del partido, todo giró en el cancerbero mexicano… desde elogios nacionales hasta internacionales… memes, chistes, bromas… faltó el gol, pero nunca el humor.
* El sábado, tocará turno a Argentina, que viene de perder el invicto de 36 partidos ante Arabia Saudita… la lógica simplista arroja: si los árabes, selección considerada en el grupo como la más débil, le ganaron a los albicelestes, entonces ¡ya chingamos!
* Como sea, México por este día, tuvo un remanso para dejar un poquito, pero un muy poquito al lado la polarización política… ¡ah, por cierto, no es por grillar! ¿Pero se dieron cuenta que fue un Moreno el que la cagó en el partido contra Polonia?