AUNQUE Claudia Sheinbaum Pardo, quiera ser la primera mujer presidenta en México, tanto en su partido, como en gran parte de la población del país, prácticamente, no la quieren. Hasta ahora, solo ha sido un capricho presidencial, su posible nominación, pero faltaría la elección constitucional y en ella participarían todos los ciudadanos que cuenten con credencial para votar, por lo que pasar por este gran obstáculo, sería muy difícil.
Por ahora, Ricardo Monreal Ávila, quien ha sido el último en ser incorporado en la lista de posibles candidatos de Morena, manejada, precisamente, por quien habrá de decidir, podría ser el que ría mejor, luego de mucho tiempo, en qué tanto el presidente de la república, como la dirigencia de Morena, lo mantuvieron marginado, aún cuando el político zacatecano, insistía constantemente en figurar dentro de los presidenciables, asegurando que por cualquier forma aparecería su nombre en las boletas electorales.
Pero eso, muchos analistas políticos, aseguran que Ricardo Monreal Ávila, tendría, en estos momentos muchas posibilidades de ser el candidato de Morena, porque en el caso de la jefa del gobierno de la ciudad de México, ya no hay mucho que pueda ayudarle, aunque el presidente, insista en hacerla candidata, más cuando de sobra se sabe que el mandatario nacional, quiere, a como dé lugar que el sucesor se comprometa a mantener los lineamientos de la cuarta transformación. Seguir insistiendo en que Claudia Sheinbaum, sea la candidata, pondría en serio riesgo el triunfo electoral y consecuentemente, el proyecto político que tanto ha defendido el propio presidente.
Todo esto está siendo considerado, no tan solo dentro de Morena, sino también en Palacio Nacional, por lo que, se comenta ampliamente, las tres figuras que quedarían a salvo para este proceso interno del partido político en el poder, serían el propio Monreal, Marcelo Ebrard, y el secretario de gobernación Adán Augusto López Hernández, por quien, seguramente, se decantaría el mismo presidente de la república.
Para el presidente, será muy difícil, en su momento, decidir la candidatura, porque tanto Monreal, como Ebrard, lucharán hasta el final, no ante la militancia de su partido, sino en la presión que puedan ejercer ante el presidente.
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LATENTE INSEGURIDAD EN VERACRUZ.
NO, DE NINGUNA MANERA, Veracruz, es el Estado de la república, más pacificado, sino al contrario, es una de las entidades con mayor riesgo para la población, a la cual ya no le sorprende que haya tanto balazo, sino que puedan ser víctimas de este desastroso panorama de inseguridad que priva en todo el territorio estatal. Para los veracruzanos, ya son más de cuatro años que han transcurrido y ya no son tiempos, para la presente administración estatal, de echarle la culpa al pasado. Los problemas que se tienen en esta importante área del quehacer gubernamental, tienen que ser enfrentados por las estrategias gubernamentales y hacer valer la fuerza del Estado, ante hechos que son, sin duda, actos de terror en las calles y las carreteras de la entidad.
Si los hechos recientes, como los que constantemente suceden en tierras veracruzanas, son ajustes de cuentas, como dice el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, pues entonces, son tiempos de actuar y de poner el mejor remedio a esta situación, porque un Estado, en las condiciones de inseguridad que vive, no puede crecer, ni desenvolverse adecuadamente, porque siempre estará presente el fantasma de la delincuencia.
A la presente administración pública de Veracruz, le quedan, más o menos, un año, diez meses con quince días, para lograr el objetivo de garantizar seguridad a los veracruzanos. Así es que, son tiempos, de darle duro.
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DICE QUE LO DEJEN TRABAJAR.
RICARDO AHUED BARDAHUILL, tiene toda la razón. Son tiempos de trabajo y para ello, ayer mismo, se dedicó, como lo hace permanentemente, a la atención de la gente, de toda la ciudadanía que acude a sus a las audiencias donde se tratan los asuntos relacionados con la administración municipal.
Ayer lunes, el alcalde, encabezó una nueva jornada de contacto con la ciudadanía, mediante una estrategia de puertas abiertas, donde se escuche a todos y conocer, de primera mano, los problemas que les aquejan, principalmente, en las solicitudes de obra pública. Ahí, el presidente municipal, atiende a todos y recibe las propuestas que más tarde son analizadas y clasificadas para incluirlas en los programas o proyectos de trabajo, sobre todo, para este año, que al parecer será más intenso que el año pasado, donde ya se terminaron muchas obras que eran necesarias para el beneficio colectivo.
El alcalde de Xalapa, ha sido claro en el sentido de que la política es para después, porque ahora, las prioridades están encaminadas a solucionar los problemas de los xalapeños, tal y como se ha venido haciendo en los recientes meses en donde se ha realizado una gran obra, pero no suficiente para la gran demandas que existe de los ciudadanos de esta capital veracruzana.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.