Bien decía Albert Einstein que todo es relativo en este universo (porque parece que hay otros mundos posibles, como existen también, por decir algo, los otros datos de YSQ). Y en verdad que el austriaco nacido cuando esa parte era Alemania tenía razón. El novio que está con la novia ve pasar los minutos casi corriendo mientras el esposo que espera a que su mujer termine de emperifollarse siente que el tiempo discurre leeeentamente.
Esto de lo relativo se hace evidente cuando pensamos en lo mucho que puede hacer en cuatro años una persona productiva, inteligente, arrojada, o en la nada en que puede convertir un cuatrienio un pelmazo perezoso como, para dar un buen ejemplo, el que cobró cuatro años como alcalde de Xalapa -de nombre Hipólito Rodríguez Herrero y de profesión indolente-, al que le pusieron el apodo del estreñido, porque llegó, se sentó ¡y no hizo nada!
Pero alguien que hace y mucho, al grado que tiene sorprendido a propios y extraños, a tirios y troyanos, es el Presidente Municipal de Altotonga, Ignacio Morales Guevara, que a un año y medio de gobernar su municipio ha logrado conjuntar una increíble cantidad de logros, tanto en lo material, como en lo cívico y en lo moral, como su nombre lo indica.
Este joven político veracruzano, descendiente de un tronco nobilísimo de su tierra, hace honor al legado de su padre homónimo, quien fue buena autoridad y ahora se ve felizmente superado por su vástago.
Nacho, como le dicen los gobernados con afecto a su alcalde actual, ha realizado una administración que compite consigo mismo en su afán de conseguir, lograr, gestionar mejorías para la cabecera y las 94 comunidades desparramadas entre la sierra alta y los valles tropicales.
Y los altotonguenses han visto que es bueno.
Primero, en lo físico muchas obras para remediar mucho de que se había hecho mal y para satisfacer necesidades ya añosas: dotación de agua potable, electrificación, caminos, bacheo.
Y en la otra parte fundamental del pueblo, el alma, un gran trabajo de consolidación de las tradiciones, el rescate del orgullo regional, la revivificación de la feria, la inédita sorpresa de una exitosa feria del libro para promover desde las raíces la lectura y el conocimiento.
En lo político, Ignacio Morales se mantiene firme en sus convicciones, al lado del partido que lo condujo al triunfo, el PRI, y pegado a quien reconoce como un ejemplo a seguir, el diputado Pepe Yunes Zorrilla, cabeza de un proyecto para llevar grandeza a Veracruz.
Y como cereza del pastel, el inquieto y joven alcalde ahora se ha metido a negociar con una de las cadenas de producción de contenidos de entretenimiento más poderosas del mundo, la casa Disney, y está consiguiendo convencer a sus directivos de que tomen las bellezas naturales de Altotonga como una excelente locación para filmar en medio de la exuberante naturaleza de la sierra oriental veracruzana.
Sus paisanos se dan cuenta que Nacho aún tiene dos años y medio por delante para seguir haciendo realidad lo que sueña y lo que imagina, y están a la mano con él para seguir haciendo crecer para bien esta parte antes olvidada del terruño estatal.