Por Edgar Hernández*
Luego de casi tres meses de recorrido de contacto ciudadano por más de cien municipios veracruzanos, Pepe Yunes se coloca -en las encuestas y sondeos reales, en las “patito”, en las cuchareadas y en las de Morena- como el aspirante con mayores posibilidades de encabezar el Frente Amplio opositor para alcanzar la gubernatura en el 2024.
Sin desestimar la presencia de otros aspirantes de oposición, la conveniencia política y ciudadana se inclina de manera evidente por el Yunes -no el del Estero en silencio total- sino por el de Perote.
Sin dejar de considerar la fuerte presencia local de la alcaldesa de Veracruz, Paty Lobeira, la del mismo senador Julen Rementería o del alcalde de Orizaba, Juan Manuel Diez Franco, quien cortésmente ha declinado por razones familiares y de edad, Pepe está posicionado, en la víspera, como el más fuerte contendiente contra Morena.
Ello se acentúa ante la señalada preferencia de ese partido en el poder en favor de Rocío Nahle, quien por su oriundez zacateca y su fama pública es rechazada.
Y es que hasta en su propio partido ha sido objeto de polémica a grado tal que enclaves de poder como el del secretario de Gobierno, Eric Cisneros y el poderoso representante de los programas de Bienestar, Manuel Huerta, le disputan la plaza encarando al propio López Obrador.
Ello de tal suerte que la abismal ventaja que hasta el primer tercio del año alcanzaba la titular de la Secretaría de Energía se ha venido acortando, mientras la presencia opositora fortaleciendo.
Gracias a una nueva narrativa, la valentía en la denuncia pública, el llamar a cuentas a la administración saliente y exigir legalidad ante el abuso de autoridad, así como su fama de honesto, el diputado federal opositor se ha reposicionado en la preferencia ciudadana que reclama el cambio.
Ya no más herencias que solo han traído desgracias a Veracruz, es el reclamo de los veracruzanos recogido por Pepe en sus recorridos ciudadanos como representante popular.
Así, a escasas ocho semanas que se tome la decisión de parte del Frente Amplio opositor por Veracruz, hay confianza en el aspirante y su círculo, no solo en cumplir los requisitos de firmas en su favor, sino en el respaldo de la sociedad civil rumbo al 2024.
Todo, desde luego considerando previsible se registre una elección de estado ante el inminente peligro de que la plaza se pierda para hacer ganar a la mala a Roció Nahle.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo