viernes, diciembre 27, 2024

Claudio X ¿el Censor de México?

Lo último

La declaración de Claudio X González en la que equipara la corrupción imperante en el gobierno de Guerrero con “lo peor” de lo experimentado en los gobiernos del PRI excede los límites de la tolerancia y por supuesto es inadmisible, tal como ya lo reclamaron el actual dirigente nacional y el coordinador de los diputados en el Congreso federal. Porque situar a la época de hegemonía priista como un periodo en el cual la corrupción se entronizó no refleja la realidad de ese fenómeno en México e insulta a una militancia en la cual ese fenómeno no es consustancial a su conducta. O ¿acaso la corrupción en México nació en los gobiernos priistas? Afirmarlo traduciría ignorancia supina de nuestra historia como país. López de San ta Anna ¿fue priista? Cuándo durante el gobierno de Carranza, la rapiña calificada como “Carrancear”, ¿era de origen priista? La expresión obregonista: “Nadie resiste un cañonazo de 50 mil pesos ¿podría atribuirse al PRI? Por la confesión del alcalde panista de San Blas Nayarit, Hilario Ramírez Villanueva, también conocido como “el alcalde dadivoso”, de haber “robado poquito” porque la administración municipal estaba en crisis ¿debe culparse de corrupción al PAN? Más aún, después de ese cínico reconocimiento, pese a su fama de corrupto, ese personaje, también conocido como “Layín”, fue vuelto a elegir democráticamente como alcalde de San Blas. Al igual que AMLO, Cárdenas, Muñoz Ledo, Monreal, Bartlett etc., Jaime Rodríguez Calderón fue priista, pero culminó su anhelo de gobernar Nuevo León candidateado por la vía independiente, sin embargo al finalizar su administración fue acusado de malos manejos por su sucesor y temporalmente estuvo tras las rejas. En un minucioso compendio sería larga la lista relativa a quienes han ejercido el poder accediendo por la vía no priista y sin embargo han sido acusados de corruptos, entonces ¿cuál es el motivo de identificar al PRI con la corrupción en México. En principio lo calificaríamos de ligereza, de ociosa reflexión por replicar irreflexivamente lo que se escucha sin conocer la realidad, de pereza mental para no ir al fondo de la verdad acerca del porqué en México la corrupción es una especie de costumbrismo, o bien de arraigada tradición. ¿Por qué? Simplemente porque en gobiernos priistas, panistas, perredistas y de Morena la corrupción “somos todos”, como se decía en tiempos de López Portillo. En resumen, a Claudio X González se le fue la lengua; pero debemos reconocer que no consuela mucho al militante priista que quien da la cara para desmentirlo sea Alejandro Moreno, el famoso “Alito” a quien Layda Sansores ya le tomó la medida. A propósito ¿por cuál de esos dos personajes, priista uno, de Morena la otra, metería usted la manos al fuego? Allí sí, ni con melón ni con sandía, digo yo.

Relacionados

Columnistas