Agencias/Sociedad 3.0
El pasado viernes, una reunión programada con alcaldes en Minatitlán se convirtió en un problema de logística para la secretaria de Energía, Rocío Nahle, ya que la falta de quórum entre los ediles asistentes llevó a la cancelación del evento.
Solo una minoría de alcaldes llegó a la reunión, mientras que el resto envió representantes, como síndicos y regidores, lo que llevó a Nahle a decidir no asistir para evitar una situación embarazosa.
La situación se agrava al saber que en lugar de la titular de SENER, Rocío Nahle, envió a su cónyuge como representante, lo que ha generado críticas y preocupación entre algunos sectores, especialmente en el contexto del proceso interno de Morena. Esta falta de organización y convocatoria podría tener repercusiones en futuras etapas, incluyendo encuestas y decisiones políticas.
Es evidente que la política a nivel local requiere una atención especial y una gestión cuidadosa, y estas situaciones pueden afectar la imagen y el apoyo de los líderes políticos en el terreno. Es crucial afinar los detalles y llevar a cabo una gestión efectiva para evitar sorpresas desagradables en el futuro.
-Con información de Versiones