Por Edgar Hernández*
Cuestión de protocolo.
El Partido de la Revolución Democrática ya entregó e hizo público su apoyo a Pepe Yunes el viernes pasado horas después de que el dirigente nacional del PRI, Alito Moreno, anunciara la nominación.
Se estima asimismo que será en breve -ha trascendido que será este lunes- cuando el Partido Acción Nacional, a través de su dirigente nacional, Marko Cortés o la dirigencia estatal se pronuncie a fin de que el Frente Amplio Opositor formalice la candidatura del peroteño.
En el mismo sentido se han venido manifestado organizaciones civiles y partidarias de Veracruz a través de manifiestos, desplegados y publicaciones en redes sociales.
De acuerdo al cronograma interno del virtual candidato, en los próximos días habrá de solicitar licencia a la diputación federal para preparar el arranque de su precampaña.
Tal como lo hemos venido señalando en este espacio, Pepe Yunes considera una vez alcanzada la investidura visite su distrito electoral con cabecera en Coatepec y formalice un acto de agradecimiento con un mensaje a todos los veracruzanos desde el malecón del Puerto de Veracruz.
En su agenda se tiene previsto además un acto conjunto con Xóchitl Gálvez posiblemente en Xalapa.
Ambos personajes están conscientes que en el imaginario colectivo representan la fórmula ganadora debido a que en lo nacional es indiscutible el arrastre de Xóchitl mientras que en lo local se complementa con el respaldo ciudadano de Pepe que ya mismo está comprobado cubre prácticamente los 212 municipios.
De hacer notar que la imagen y manifestaciones de simpatía hacia Pepe, luego del “Destape”, han venido creciendo.
El ánimo está de su lado particularmente el ciudadano.
Hay confianza en que se fortaleza los siguientes meses y supere a Rocío Nahle, quien por cierto el fin de semana se vio muy apagada incluidos los acarreados que no muestran ánimo social, solo cumplen por obligación.
En el cuartel de Pepe Yunes hay confianza en el respaldo ciudadano que es el único que podrá impedir, a través del voto, la elección de Estado que prepara Cuitláhuac García.
Y es que a la buena no ganan.
Así se vio en el 2021, en el marco de las elecciones intermedias.
Así se observa aun cuando Morena insiste en que Pepe está seis puntos abajo si hoy fueran las elecciones.
Concedamos, sin embargo, que sean ciertas y que son un indicador de cómo están las cosas, pero no puede dejar de considerarse que son válidas el día que se levantan, que aún no está oficializada la candidatura de Pepe, que ellos llevan conservadoramente hablando dos años en precampaña y que en abierta violación a la ley, el gobernador es el jefe de campaña y defensor de la zacatecana.
La ventaja aparente de hoy en favor de Nahle habrá de nivelarse al paso de los días una vez que el candidato del Frente Amplio por México y la Alianza Fuera y Corazón por México inicie su recorrido con la investidura digamos oficial y refrende su compromiso de rescatar a Veracruz de la corrupción y la inseguridad pública.
El de Pepe será un periplo de unidad.
No fincará su estrategia en la agresión o adjetivación contra la opositora; tampoco se acreditará por la vía del escándalo o la declaración incendiaria, sino en el compromiso ciudadano, en la propuesta, en la presentación de la brutal realidad que vivimos y en el cómo se va a rescatar a Veracruz.
Pepe Yunes es el candidato de la paz. Es quien busca regresar a nuestra tierra la alegría e iniciar la reconstrucción de la entidad hoy sumida en el peor de los abandonos.
Los activos en su favor sin necesidad de denunciarlos porque son del dominio público, son la fama pública de Nahle, caracterizada por la corrupción, el no cumplimiento de compromisos emblemáticos para la república como lo ha sido “Dos Bocas” en donde se gastó 250 mil millones de pesos con cero resultados a la vista, la refinería no produce un litro de gasolina y ser zacatecana.
Los veracruzanos están inconformes desde que empezó a circular en el ámbito de la opinión pública la propuesta de Roció Nahle como candidata de Morena a suceder al atarantado de Cuitláhuac García.
En múltiples ocasiones se denunció la ilegalidad de su aspiración por ser violatoria a la Constitución General de la República.
Se hizo además énfasis en que Roció Nahle no conoce Veracruz ya que, si bien se avecindó en Coatzacoalcos para justificar presencia en nuestra tierra, desconoce lo que pasa en los 211 municipios restantes.
Ello debido además a que su trabajo legislativo y para López Obrador ha sido de carácter federal.
Por donde se le vea no entra.
Pero además a las mujeres veracruzanas les cae en la punta de callo que eventualmente pudieran ser gobernadas por una fuereña cuando 4.2 millones de féminas tienen más derecho por haber nacido aquí, haber brillado en ámbitos de la vida pública y por hacer manifiestos sus deseos de ser consideradas.
Seguiremos tejiendo sobre el asunto.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo