La Secretaria del Trabajo de Veracruz, Dorheny (García) Cayetano, presentó el martes pasado su renuncia al gobernador Cuitláhuac García Jiménez, su protector político y pariente cercanísimo, “para ir” -según sus propias palabras- “en busca de la coordinación de la Defensa del Federalismo y abonar a profundizar la transformación encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador y los 22 gobernadores y el jefe de Gobierno de la CDMX.”
Eso, traducido al español no morenista, quiere decir que va a buscar ser la candidata de Morena y sus aliados en pos de la senaduría destinada a una mujer por equidad de género.
Junto a su explicación, declaró de manera tronante que “es tiempo de mujeres y sobre todo de un relevo generacional; es tiempo de que esta generación agarre el toro por los cuernos”.
El asunto del “relevo generacional” viene porque está compitiendo por la anhelada candidatura con la diputada federal del PVEM Mónica Robles Barajas, quien también busca con denuedo ser la abanderada de la coalición del partido oficial con el PT y el Verde. Es decir, según Dore, ella representa el cambio y Mónica significa la continuidad en la nomenklatura política de Veracruz.
La aspiración de la ex Secretaria del Trabajo está firmemente apoyada por el Gobernador, por su grupo y por los munificentes recursos financieros y materiales con los que cuenta la administración estatal. Le van a echar toda la fuerza para que gane, no obstante que, como ella dice en sus propias palabras, su trayectoria política “si bien ha sido corta es muy concisa”. Adivinar qué quiere decir con eso.
Y como muestra del afecto por su valedora, el novel mandatario se atrevió a dedicar una parte de su mañanerita región 4 a atacar furibundamente a Iván Hillman Chapoy, esposo de la diputada de Coatzacoalcos, y a ella misma, solamente porque aspira a ocupar una posición que considera que le pertenece en propiedad absoluta a su querida parienta.
Por su lado, la diputada Mónica Robles Barajas, además de su trayectoria política dentro de Morena, cuenta con la cercanía de su familia con Andrés Manuel López Obrador. No por nada su madre, Roselia Barajas, es Embajadora de México en Costa Rica, lo que es una muestra del afecto y la amistad que comparten los Robles con el Presidente de la República.
Así que las cartas están echadas en la competencia por quién acompañará a Manuel Huerta Ladrón de Guevara en la fórmula veracruzana para el Senado.
Dorheny (García) Cayetano, impulsada por el gobernador Cuitláhuac García.
Mónica Robles Barajas, con el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador.
¿Quién cree usted que va a ganar?