En su afán de quedar bien con el gobernador Cuitláhuac García y sobar el ego del Ejecutivo estatal, el rector de la Universidad Veracruzana (UV), Martín Aguilar Sánchez, ha expuesto al escarnio público no sólo al mandatario de Morena sino que además, por el efecto carambola, seguramente terminará restándole votos a los candidatos del partido guinda tanto a la gubernatura como al Senado, ya que el frente opositor (PRI-PAN-PRD) acaba de registrar como candidata a la Cámara alta del Congreso de la Unión a la doctora Sara Ladrón de Guevara, quien en agosto de 2021 le entregó precisamente la Rectoría.
Por supuesto que no toda la responsabilidad de este desliz político se le debe imputar al sociólogo e historiador que pese a su mediocridad académica fue electo Rector por un grupo de notables que integran la Junta de Gobierno, ya que el gobernador García Jiménez pudo haberse rehusado a recibir el pasado 17 de febrero, en el marco del Día del Inventor Mexicano, el reconocimiento que recibió de la máxima autoridad de la UV por la patente del “Tribómetro Electrohidráulico”, en cuyo proyecto trabajaron conjuntamente tres investigadores de la región Xalapa y cuatro más de la zona Veracruz-Boca del Río.
Casualmente ayer, Jaime Fisher, uno de los académicos de la Universidad Veracruzana más críticos, hizo pública una carta que le dirigió al rector Martín Aguilar, en la que le recuerda la siguiente anécdota: “Érase una vez allá por 1997-98, cuando la UV había iniciado o estaba por iniciar su vida ‘autónoma’, un grupo de universitarios lambiscones se acercó al gobernador para proponer otorgarle el doctorado honoris causa. Patricio Chirinos les contestó, palabras más palabras menos: ‘Señores, yo no merezco eso, pero la Universidad Veracruzana tampoco. Están ustedes por empezar su vida ‘autónoma’ y no pueden iniciarla otorgando al gobernante esa distinción’. Los zascandiles salieron de palacio de gobierno con la cola entre la patas”.
“Pero ahora la UV, por tu conducto, otorga un reconocimiento al gobernador como inventor; pero no como el inventor del ‘fin de semana a media semana’, sino como inventor de verdad, al lado de Marconi, de Graham Bell, de González Camarena. La Universidad Veracruzana, Martín, no merece eso. Aunque tú y el gobernador sí.
“Me dirás –intentando diluir culpas y responsabilidades– que ya se le otorgó a un gobernador hasta un doctorado en Derecho sin merecerlo, por no haberlo cursado, y tendrías razón. Pero ¿por qué ahora –a media semana– me obligas a escribirte estas líneas que no merezco? Sé que le debes mucho al gobernador. La rectoría –que recibiste por su gracia– no fue poca cosa. Eso se lo debes tú al ingeniero Cuitláhuac García, no la Universidad al gobernador del estado. Pero el ‘reconocimiento como inventor’ no se lo otorgó Martín Aguilar, sino el rector de la Universidad Veracruzana, y en nombre de toda la Universidad Veracruzana. Hiciste, así, pasar como institucional una componenda entre particulares.
“Te repito que eso lo merecen tú y el gobernador, se lo tienen bien ganado, y quedará registro histórico para que las generaciones futuras lo sepan. Pero no lo merecemos los universitarios, ni los veracruzanos ni la Universidad de los veracruzanos.
“¿Dónde quedó la crítica del poder? ¿Recuerdas que desde que estábamos en la prepa eras de ‘izquierda’, cualquier cosa que entonces y ahora se quiera decir con eso? Y un tiempo después, en la primera generación de la Facultad de Sociología –fundada por tu mentor, Ricardo Corzo, a quien superaste en eso de arrejuntarse con El Príncipe–, en donde destacabas por tu discurso ‘progresista’, ‘crítico’ y siempre ‘de izquierda’. ¿Lo recuerdas?
No espero respuesta ni explicación porque nadie está obligado a lo imposible. Nomás te escribo porque me adelantaste el fin de semana. Y eso me encabronó, molestó un poco.
“Sigue inventando. Te saludo con el afecto de siempre.”
Otro, al que el rector de la UV le dio tema para arremeter también en contra del mandatario veracruzano fue al ex aspirante del PRI a la gubernatura, Héctor Yunes Landa, quien ha arreciado en redes sociales una campaña sistemática en contra de García Jiménez, con el cual mantenía cierto diálogo político al inicio de su administración, pues inclusive el morenista recibió en una ocasión en su despacho de Palacio de Gobierno al ex senador y ex diputado del partido tricolor.
Inclusive, en una reciente publicación que hizo, Yunes Landa dejó entrever que aún mantiene comunicación con algunos allegados al mandatario veracruzano.
“En respuesta al post sobre el ‘inventor’ de mentiras y falso científico que resultó ser Cuitláhuac García, un oficioso personaje de Palacio de Gobierno me llamó para justificar que su patrón haya recibido un premio, que resultó un plagio.
“Me dijo, textualmente, que ‘el señor gobernador –entendí que se refería a Cuitláhuac–, asistió a recibir el premio a insistencia del rector de la UV’.
“Como universitario, me avergüenza la actitud servil y sumisa del rector y la falta de respeto al trabajo de los verdaderos investigadores.
“Dado que, en casos como este, la crítica no es suficiente, la próxima semana lanzaremos una iniciativa para que la comunidad universitaria vote para que:
“1. Este reconocimiento sea retirado al gobernador;
“2. Que haya una disculpa pública del rector y,
“3. Se distinga el trabajo de quienes hicieron el trabajo y lograron la patente del invento premiado.
“No permitiremos que el rector de nuestra Máxima Casa de Estudios actúe como empleado de un cínico desvergonzado”, concluyó el priista, uno de los principales aliados y operadores políticos de José Francisco Yunes Zorrilla, el candidato a la gubernatura más fuerte de la oposición.
Seguramente doña Rocío Nahle, abanderada de Morena al gobierno de Veracruz, debe estar exclamando: “¡No me ayuden, compadres!”.
“¡Pero qué necesidad!”, diría el extinto cantautor Juan Gabriel.