Le está dando la vuelta al mundo un vídeo de lo que está sucediendo en la Amazonia, donde un afluente de la selva del impresionante Río que le da vida a millones de personas, se secó completamente en solo tres meses…
Lo que me llamó la atención, pues todos los días cruzo un riachuelo, que, en años pasados, sus aguas llegaban a desbordar el estrecho puente y había que cruzar a pie, por uno colgante que está a escasos metros de distancia; pues desde hace unos dos meses, está completamente seco. El asunto no es muy serio, es sumamente grave…
Allá, en la selva amazónica, la temperatura del agua se ha elevado hasta 39º ocasionando la muerte de delfines de agua dulce y numerosas especies, trastocando drásticamente el ecosistema y la forma de vivir de sus ribereños…
Todo esto, mientras las inundaciones en el Sur de Brasil causaron cuantiosas y terribles pérdidas en más de 300 municipios. Y los incendios forestales en Canadá han devastado millones de hectáreas…
Por lo que un grupo de científicos prestigiados, han lanzado la voz de alarma, de peligro extremo, para llevar a cabo la tarea más urgente que ha existido jamás; reducir las emisiones contaminantes…
Se dijo que estamos en el límite del desastre. Que se debe actuar ahora que todavía se puede. Y lo mejor de todo, es que dieron soluciones y con ellas esperanza, pues existe la tecnología para ya no utilizar combustibles fósiles…
El impactante vídeo termina: “Nuestra casa la tierra, nos lo pide a gritos”. -así con minúsculas- Y se lanza el alarido
¡Salvemos al Planeta!
Lo que no dicen los científicos, es que hay que salvarlo, sí; pero de nosotros mismos, de la especie humana y su forma de vivir contra natura. Según los científicos -que muy frecuentemente acaban dándole la razón a los filósofos- ya hay la tecnología para no extraer la energía del subsuelo…
Lo que da a entender, que lo que pretenden es sustituir una forma de energía por otra que no contamine, para continuar viviendo de la misma forma tan desordenadamente ambiciosa en que se vive hoy…
Para qué ir a la Luna o a Marte, cuando hay gente que no tiene agua. La inversión mundial en armas es de escándalo. Es un insulto a la especie humana. Es como si los ángeles y querubines anduvieran con metralletas cuidando la entrada del cielo…
Sin lamentablemente soslayar, que nadie les va a hacer mucho caso; porque aquí; la lana es la lana. Y punto…
Y no es que no tengan razón en el peligro en que estamos. Y que es la tarea que todos tenemos que emprender. En lo que no estoy de acuerdo, es en que sea para continuar con la misma forma de vida. La misma forma de vivir; porque de una u otra manera, se volverá a lo mismo…
Finalmente, la forma de vida es lo que hay que cambiar; pero nadie quiere hacerlo. Nadie quiere dejar su poltrona existencia. Por lo que habrá que enfrentar lo que venga. Y quien no quiera cambiar su forma de vivir, quien no entienda que “la tierra” no es “nuestra casa”, como dicen los científicos, saldrá sobrando, por decirlo de la mejor manera…
Lo que extraña, es que hasta ahora los científicos se hayan dado cuenta de que vamos mal; y aunque de alguna manera reconocen que la Tierra es un ser vivo -si no estuviera viva no podría dar vida- que está deshaciéndose de sus parásitos…
Pues hasta Koko, la legendaria gorila que se comunicaba con los humanos y que murió el 21 de junio del 2018, ya lo había claramente advertido. “El tiempo corre” “Ayuden a La Tierra” “El Hombre es estúpido” “La Naturaleza los observa”.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.