Agencias/Sociedad 3.0
Durante el séptimo foro sobre las Reformas al Poder Judicial, la ministra de la suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Lenia Batres, afirmó que no hay que desconfiar sobre la elección popular de miembros del Poder Judicial, ya que «si el pueblo elige a un imbécil para la Corte, pueden removerlo».
«No hay que desconfiar tanto del pueblo, no hay que creer que mandará a la Corte curanderos y parteras, y si alguna vez se equivoca mandando un imbécil a la Corte como suele mandarlos a otras partes, el mal no es eterno porque los magistrados van a ser movibles», declara.
Detalló que a partir de 1995, los jueces y magistrados han sido designados mediante un concurso que sólo ha beneficiado a sus familiares de quienes trabajan en el Poder Judicial.
«A partir de 1995, jueces y magistrados han sido designados mediante concurso cerrado en el que sólo pueden participar personas que ya laboran en el Poder Judicial. Estos concursos, más que un mecanismo de selección de los mejores profesionales del derecho, han funcionado como escalafón para quienes ya forman parte del Poder Judicial que en un 49% de acuerdo con el Consejo de la Judicatura Federal son familiares actualmente», aseveró.
Para finalizar, la ministra afirmó que sólo los tiranos deben temer a la democracia y que en México la democracia es la única forma de que el pueblo realice su soberanía.
Con información de Proceso