Finalmente Trump cumplió su advertencia acerca de imponer aranceles a productos mexicanos que ingresen en los Estados Unidos, esa decisión la tomó pese a los esfuerzos del gobierno mexicano para atender sus exigencias de combatir a los carteles de la droga: cientos de generadores de violencia han sido detenidos, decenas de laboratorios desmantelados, se han incautado 26 toneladas de cocaína, y 29 destacados capos fueron entregados a la justicia de los Estados Unidos, aun así no fueron suficientes y dejaron insatisfecho a Trump, quien se piensa el ombligo del mundo con derecho a menospreciar a sus pares de otros países e imponer lo que le venga en gana. Por el lado mexicano, escuchamos en la “mañanera del pueblo” que el gobierno está preparado para enfrentar la imposición de aranceles, que tiene un Plan de respuesta, sin embargo, hasta ahora desconocemos en qué consiste ese plan, excepto que para el domingo próximo se convoca a una reunión masiva en el Zócalo de la CDMX para “informar al pueblo” de lo que está ocurriendo”. Ese diferimiento pudiera deberse a una reacción de “cabeza fría” y prudente o bien para dar tiempo al desarrollo de los acontecimientos y actuar en consecuencia. La cita es el domingo en el Zócalo.
Ahora recordamos cuando Trump era presidente hace seis años y amenazó con imponer un 5% de aranceles a México, de inmediato AMLO mandó a Ebrard a cabildear y como resultado se suspendió aquella amenaza; entonces, para celebrar el “triunfo” de nuestras negociaciones se realizó en Tijuana una manifestación masiva con la asistencia de “23 gobernadores, diputados federales, senadores, presidentes municipales, representantes religiosos, representantes empresariales y el presidente Andrés Manuel López Obrador para festejar nuestra defensa de la dignidad de México y a ala vez refrendar la amistad con Estados Unidos, no habría aranceles. Fue un gran teatro porque en aquellas negociaciones México accedió en casi todo lo que Trump pedía. Mike Pompeo, el secretario de Estado de Trump, publicó en 2023 su libro “Never give an inch” (Nunca cedas una pulgada) donde reveló la forma en cómo había “doblado” a Ebrard para implementar el programa ‘Permanezca en México’. Existen ciertas similitudes de aquel episodio Trump Vs México de 2019 con este de 2025, también diferencias porque ahora escaló el porcentaje a 25% y exige cabezas de políticos mexicanos porque “es intolerable”, según su dicho, “la alianza del gobierno con los cárteles”. La tarde de ayer, el secretario de Comercio de aquel país anunció que Trump analiza la posibilidad de revertir los aranceles, “borracho no come lumbre”, dicen en el llano. Pero, suponiendo que efectivamente haya esa reconsideración ¿qué informará la presidenta el domingo? Porque supuestamente va a informarnos lo relativo al Plan de contingencia ante la imposición de los aranceles. Eso queda en la incógnita porque México pausa hasta el domingo su decisión. Eso sí, seguramente se entonará el himno nacional y loas a nuestra defensa de la soberanía nacional (como hace seis años escuchamos desde Tijuana), porque “como México, no hay dos”.