Opiniones y Comentarios
Julio Ricardo Blanchet Cruz
Si ya de por sí la pandemia ha hecho patente y además exhibido la inutilidad de los dioses; a tal grado que ni a sus “representantes” los protege del vilipendiado Bicho. Al que bueno se les ha hecho culpar de todas las defunciones. Y eso no está bien…
Porque de ser cierto, en vez de perseguirlo hasta querer eliminarlo, habría que santificarlo y llevarlo a los altares para que deje dinero. San Bicho, patrono de las pandemias. No suena mal…
Porque ya nadie se muere de cáncer, ni de diabetes, ni de problemas cardiorrespiratorios. San Bicho ha salvado a todos los que creyeron en él. Los que no; pues no. Y curiosamente no se murieron…
Importante no confundir a San Bicho, con San Vito, o mal de Parkinson, ese no deja dinero por eso lo dieron de baja en la Hacienda celestial…
Hoy la moda es: -así como se traen los pantalones rotos y mientras más rotos más caros, prueba irrefutable de que la humanidad está enferma, pues se les cuela el aire por los agujeros. Los de los pantalones ¡claro!- El contagio…
Que ya está al tope y se pelea el primer lugar parejeando palmo a palmo con la estulticia, que finalmente es la principal y la que siempre gana, pues invariablemente va hasta adelante, y atrás de ella están todos los demás males…
Oportuno recordar a Pitágoras (569 – 475) “El bien y el mal no existen; solo existe la salud y la enfermedad”. La enfermedad es el mal de la humanidad. La humanidad está enferma; y así, enfermos, ciertamente que salimos sobrando; y por mucho…
Los humanos somos el mal de La Tierra. Y no hace falta tener tres dedos de frente para reconocerlo. Los de casa son los Bichos, todos; no nosotros. Los humanos somos como los soldados, ya saben Ustedes dónde, amables lectores- que llegan dónde no los han invitado y hacen matazones para adueñarse de todo…
Aunque bueno, no todos. Hay unos peores que otros. Podría decirse: “Hombre que crece torcido…” se mete a un seminario…
Y se trae a cuento, porque parece que de nada sirvió que se diera a conocer el caso del degenerado de Marcial Maciel –al que por poco y lo hace Santoel Papa polaco Karol Wojtyla- y todos los que le han seguido; pues continúan los escándalos de los propios Legionarios de Cri$to, para no variar…
En Italia ya se traen otro escándalo, pues serán sentados en el banquillo, acusados de extorsión, para tratar de tapar más hechos de pederastia. No tienen remedio, “Genio y figura…”
Cambiando de tema…
Por cierto que en Polonia, multarán a las plataformas con 13 millones de dólares por cada post que censuren. Y el Consejo de la Federación Rusa hará lo mismo sin que hasta la fecha haya dado a conocer el monto con el que las penalizará.
El apagón trajo consigo el distanciamiento entre Alemania y Washington. En este mundo globalizado, las heladas sin gas y sin luz que acaban de padecer en Texas, donde hubo hasta muertos, ora sí que de frío, han hecho sentir la importancia que significa tener gas…
Por ello, Alemania ha tenido que optar por permitir terminar el gasoducto Nord Stream 2 que llevará gas desde Rusia a Europa, y dejar de recibirlo por barco desde EE.UU. Y si encima de todo es más barato, el no haber permitido que se terminara el último tramo para que entrara en funciones, no nada más los alemanes, sino en general los europeos se le hubieran echado encima. Y no porque sea una cuestión de economía; sino de sobrevivencia…
El ser humano no está diseñado para desarrollarse en el frío; pero el impulso destructor que tenemos -adquirido- nos ha llevado a invadirlo todo. Como virus, como bacterias que infectan a un organismo ¡vaya!-. Que es lo que hasta ahora hemos hecho los humanos; y se sigue haciendo, a pesar de los discursos…
Ya las potencias, o sea, los malosos, se disputan la Antártida para sacar petróleo o lo que encuentren de valioso. Y yo pregunto ¿para qué? Ya llegamos hasta Marte -pobre Marte, no sabe lo que le acaba de caer encima. Cáncer es poco- Pero; ¿sirve de algo, acaso somos mejores? ¿Ya la gente no muere de hambre, o de sed aquí en La Tierra? Pero somos bien inteligentes.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.