Durante los años de la hegemonía política del PRI figuró como su “reserva electoral” porque siempre fue fuerte bastión tricolor, a diferencia del Estado de México y la CDMX, primero y segundo padrón electoral del país, donde el PAN y el PRD competían fuertemente al PRI, y en la capital donde solo los chicarrones del PRD tronaban, antes de la debacle de 2018. Ahora Veracruz es gobernado por MORENA y pasó al cuarto lugar en cuanto a padrón electoral porque Jalisco lo sustituyó, en mucho debido a que es una entidad receptora de migrantes y nosotros, Veracruz, es expulsor. Padrón electoral: 5 millones 979 mil 606 empadronados; 3 millones, 160 mil 924 votos, muy buena participación ciudadana. Ahora, la otrora maquinaria priista ha enmohecido, el cinturón azul desapareció y la franja amarilla se ha desvanecido por completo. Según el PREP, en Veracruz, el bisturí como herramienta de cirugía político electoral de otrora ha sido sustituido por la técnica de rayos laser y trajo a luz un Congreso local todo Morena y en el territorio ya no más azul, ni amarillo, tampoco tricolor.