viernes, noviembre 22, 2024

¿Pausa invernal?…

Opiniones y Comentarios

El comienzo de toda guerra puede descubrirse, no en el primer acto de hostilidad, sino en los preparativos que la anteceden”.  John Milton (1608 – 1674) el poeta y ensayista inglés, en ocasiones situado a la par de William Shakespeare (1564 – 1616) y cuyos tratados de política fueron consultados para la redacción de la Constitución de los EE.UU.

Mientras Ucrania recibe de Washington 90 toneladas de armamento por un valor de 200 millones de dólares; con lo que ya van unos 2,700 millones que ha enviado para el “paquete de seguridad”…

Independientemente de lo que ha recibido de Inglaterra de armamento ligero para antitanques; argumentando que el país se prepara para la invasión rusa; y de la que enviarán los países bálticos, a los que Washington ya ¡autorizó! a remitir armamento…

Lo desconcertante es, que dentro del “paquete” que EE.UU. le proporcionó a Ucrania, van helicópteros de fabricación rusa M-17 que le habían comprados al Kremlin para enviarlos a Afganistán-que se suspendió al regreso de los talibanes -primero sus enemigos y después socios- según fue confirmado en una rueda de prensa por la vocera de la Casa Blanca Jen Psaky…

Al mismo tiempo que esto sucede, el Departamento de Estado norteamericano ordenó la evacuación de las familias de sus diplomáticos en Kiev.  Lo que no permite pensar en buenos augurios…

Y menos cuando de acuerdo con el Washington Post, EE.UU. le pidió a Rusia que “mantenga en secreto la respuesta” sobre las garantías que exige Rusia para su seguridad…

Garantías que la misión diplomática de Washington quedó de enviar por escrito, toda vez que durante las pláticas que recién sostuvieron en Suiza sobre el tema, no llegaron a ningún acuerdo…

Ni al parecer llegarán; pues la posición de ambas partes parece ser intransigente y definitiva.  Rusia argumenta que EE.UU. no respeta los acuerdos ya firmados desde los 90s en el sentido de que la OTAN no expandiría sus fronteras hacia el país eslavo; y que Ucrania no sería admitida como miembro de la OTAN; pero Washington no quiere reconocerlos…

Lo mejor de todo, es que, en medio de la fuerte tensión, el Presidente ucraniano, Viktor Yúshchenco, quien antes de llegar a la presidencia era cómico de profesión, lo que habla de su poca preparación política para gobernar…

Y de paso explica el sometimiento hacia los designios yanquis; pues, en medio de tanta tensión, ha declarado que es tiempo de que se renueve el contrato por medio del cual Rusia seguiría enviando gas a Europa a través de ellos…

Desde luego que el frío invierno que sufre Europa puede ser un factor muy importante que deberá evaluarse antes de iniciar cualquier confrontación; ya que es obvio que Rusia dejaría de enviar el gas a Europa…

Sin embargo, no deja de ser de importancia que el Jefe de la Marina alemana, Kay-Achim Schönbach, quien fungía como Jefe de la Armada alemana, hubo de dimitir al alto cargo después de haber declarado que Crimea nunca volvería a ser parte de Ucrania…

Y más.  Pues tachó de tonterías el que Rusia vaya a invadir a Ucrania.  Y aunque aclaró que esa una opinión personal, no del ministerio de defensa de su País, el escándalo diplomático que generaron sus palabras terminó, como arriba se cita, con su renuncia…

No obstante, la tensa situación podría llegar a favorecer que el gasoducto Stream II comenzará a funcionar; y desde Alemania dejaran de poner pretextos para que el gas les llegase desde Rusia y desde ahí se surtiera al resto de la Unión Europea.  Lo que además representaría una fuerte fuente de ingresos y una relativa autoridad…

Y se puede pensar en ello, ya que Berlín negó la posibilidad de enviar armas a Ucrania, declarando que solo enviará ayuda sanitaria.  Pero, en fin.  Ya bastante tenemos con el cambio climático; más la estulticia de los gobernantes y la perversidad de los laboratorios químico-farmacéuticos con el “manejo” de la pandemia…

Misma que ha llevado a la ruina a miles de millones de personas en beneficio de unos cuantos y al desabasto de los pobres y la clase media; como para encima padecer una guerra que acabaría perjudicando a todos; menos a los más ricos ¡claro!

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.

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