Tabasco sin duda ha de repercutir en Veracruz… bueno, quizás no tanto en lo general, pero sí en lo particular, especialmente en quienes participan en la vida política de Morena.
Por un lado, está Rocío Nahle y su desempeño en la secretaría de Energía. Por otro lado, Adán Augusto López Hernández y su nuevo desempeño como promotor de la Revocación de Mandato.
¿Y cómo repercute pues el desempeño de estos animales políticos en el escenario moreno veracruzano? Muy simple:
El presidente anunció que en el 2022 iba a inaugurar dos de las magnas obras que tiene comprometidas en su Gobierno: El aeropuerto internacional Felipe Ángeles así como la refinería de Dos Bocas.
Al momento, ya cumplió en parte con la primera obra, es decir, “haiga sido como haiga sido”, cortó el listón del AIFA… lo inauguró pues… y tras una semana de estar envuelto en las críticas a favor o en contra, ni quien se acuerde de él…
Es para el dos de julio que se tiene contemplada la inauguración de Dos Bocas, que de acuerdo a lo expresado por la misma Nahle García, hasta finales de marzo se llevaba un 87 por ciento de avance, por lo que tiene casi tres meses para concluirlo.
El columnista de El Universal Mario Maldonado “tiene otros datos”: Asegura que la obra apenas si alcanza el 50 por ciento de avance.
Sabemos que el 2 de julio el presidente inaugurará la refinería con el corte de listón esté como esté ¡y listo! Es seguro también que el tres de julio de este año seguiremos sin tener autosuficiencia en la producción de gasolina y diesel pero vayamos con tiento: la prioridad es tener lista la refinería, lo demás, se verá una vez que esté trabajando como maquinita de reloj Dos Bocas… es decir, un año de gracia…
El asunto no es tanto que llegue el dos de julio y corte el listón AMLO y le dé sus palmaditas a Rocío Nahle, no… se trata de saber cómo es que se elevó el costo del proyecto.
De acuerdo con Bloomberg, se estima que su construcción cueste alrededor de 12 mil 500 millones de dólares, lo que eleva el calculado que el director de Pemex tenía hace apenas unos 16 meses: 8 mil 900 millones de dólares.
El columnista de El Universal Mario Maldonado tiene otros datos: Asegura que se elevó hasta los 14 mil mdd.
A simple vista, cualquiera de las dos cifras no parece mucho (pero sí lo es) y es suficiente para poner en tela de duda tanto a Rocío Nahle como al mismo presidente. Sí, lo sé… están las auditorías, las contralorías pero también las alcahueterías bajo la misma cantaleta: “No somos iguales”…
No obstante ello, hacen mella estas dudas en el desempeño de Nahle y en su futuro político inmediato más cuando la carrera por la gubernatura ya está emparejada…
El otro caso, el del secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, repercute desde dos escenarios:
El primero, cuando aparece como promotor de la Revocación de Mandato y declarando con la Reforma Electoral de AMLO, la extinción del INE como hoy lo conocemos.
El segundo, con la ceguera de AMLO para “aceguerar” (o asegurar, si quieren) que a su secretario de Gobernación, el encargado de la vida política de todo el país, no lo vio como un merolico político, lo que de inmediato expone que el 2 del país cuenta con esa alcahuetería de la que líneas arriba hablábamos y a la vez, vara alta para ponerse entre los candidateables a la presidencia este 2024, con mucho a su favor: cercano al presidente; su familia, cercanísima al presidente; afinidad tabasqueña; y es evidente que entiende la misma política que ejerce el presidente…
¿Y cómo repercute su inclusión entre los aspirantes al 2024? Muy sencillo: Cuitláhuac estaría jugando en el bando equivocado…
Conste, hablo de lo inmediato… esta cosa política cambia a cada momento… un buen termómetro será el dos de julio y lo que se hable del sobrecosto de Dos Bocas y de qué tanto deje de desempeñar su papel como secretario de Gobernación Adán…