Para lograr atajar el tráfico de fentanilo, México y Estados Unidos acordaron iniciar la primera campaña binacional de la historia para informar acerca de los peligros del fentanilo a jóvenes y sus familias.
El canciller Marcelo Ebrard informó lo anterior al salir de una reunión entre el presidente Andrés Manuel López Obrador con la encargada de la Casa Blanca para este asunto, Elizabeth Sherwood-Randall, con la presencia de funcionarios de ambos países.
Uno de los motivos centrales de la visita de Sherwood-Randall, quien también es asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, fue abordar el tráfico de fentanilo, un opioide sintético fabricado en México con químicos de China que ha causado cientos de miles de muertes por sobredosis en Estados Unidos.
Por su parte, López Obrador se mostró satisfecho con el resultado del encuentro y explicó que también abordaron temas como el tráfico de armas o las recientes tensiones entre ambos países.
De cara a la próxima reunión centrada en el fentanilo, que se prevé que se celebre en abril en la capital estadounidense, el mandatario mexicano designó a la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, como la contraparte de Sherwood-Randall.
Esta mañana, López Obrador adelantó que entregarían un informe a la delegación estadounidense y se comprometió a “seguir ayudando y apoyando” para poner fin al tráfico de fentanilo.
Ebrard anunció que uno de los datos que le han trasladado a Washington es la cifra de incautación de fentanilo, que supera las 6 toneladas.
“La mayor parte de la gente ni siquiera sabe qué es el fentanilo, entonces se tiene que informar a tiempo para evitar que aumente el consumo en nuestro país”, subrayó el canciller.
En esa línea, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, indicó en un mensaje en Twitter que ambos países deben de “coordinar esfuerzos contra el tráfico y producción ilícita de fentanilo”.
El fentanilo fue uno de los temas destacados de la Cumbre de Líderes de América del Norte que se celebró en enero pasado en Ciudad de México y reunió a López Obrador, Biden y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
La Administración del Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos ha dicho que existe “una oleada de fentanilo y metanfetamina que están siendo empujadas desde México a Estados Unidos”.
Marcelo Ebrard negó este jueves que Estados Unidos haya emitido reclamos por el tráfico de fentanilo en la reunión en Palacio Nacional.
“¿Reclamos? No, no hubo”, dijo el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, a los medios de comunicación al finalizar la reunión.
México, continuó, ha incautado ya más de 6 toneladas de fentanilo.
“Todas las incautaciones de fentanilo que se hacen en México, si no se hubiesen hecho, esas pastillas habrían causado, no digo cientos, miles de muertes en los Estados Unidos”, destacó Ebrard.
La reunión ocurrió en medio de la polémica desatada por el secuestro de cuatro estadounidenses en la ciudad fronteriza de Matamoros, Tamaulipas, de los que dos fueron asesinados, y la consecuente propuesta del partido republicano de Estados Unidos de declarar la guerra a los cárteles mexicanos y designarlos como terroristas.
El pasado miércoles, los republicanos presentaron dos proyectos de ley que abogan por considerar a los cárteles mexicanos como grupos terroristas para así autorizar el uso del Ejército para combatirlos.