Agenciais/Sociedad 3.0
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó que Estados Unidos debe evaluar los efectos negativos que la imposición de aranceles a las exportaciones mexicanas tendrá no solo para México, sino también para su propia economía. Durante su conferencia matutina de este miércoles, la mandataria subrayó que las medidas impulsadas por el presidente Donald Trump podrían generar consecuencias significativas para ambos países.
“Lo que supuestamente quiere el presidente Trump es que se muevan de aquí las fábricas para que se vayan allá. Sí va a tener efectos para la economía mexicana, pero también tiene muchos efectos allá: en el muy corto plazo le afectó más en términos de la caída de las bolsas. Ellos también tienen que reflexionar frente a lo que ocurrió en estos días”, señaló Sheinbaum.
La jefa del Ejecutivo destacó que, a pesar de la imposición “unilateral” de aranceles, el peso mexicano no se vio severamente afectado. “El peso no llegó ni a los 21 pesos (ayer), fue 20.80 más o menos. Ayer hubo una buena reacción de los mercados con el peso, y hubo una caída de las bolsas de valores muy importante en Estados Unidos”, explicó.
Sheinbaum reconoció que las medidas de Trump impactarán la economía mexicana, pero insistió en que, en el corto plazo, los efectos también serán negativos para Estados Unidos. “La determinación del magnate no tiene razón de ser, ni hay argumentos para mantenerla. Además de muchas consecuencias negativas para las dos naciones, generará un incremento de precios en Estados Unidos en el corto plazo”, afirmó.
La presidenta mencionó que el secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, ha buscado un esquema de acuerdo tras observar la caída de las bolsas. “Supongo que él mismo está buscando un esquema distinto, pero depende de la decisión de Trump”, comentó.
Sheinbaum reiteró que su administración mantiene las puertas abiertas al diálogo y recordó que, en los últimos 30 días —periodo en que se suspendieron temporalmente los aranceles—, se alcanzaron diversos acuerdos bilaterales en materia de seguridad y comercio. Sin embargo, lamentó que la decisión final de imponer aranceles haya sido unilateral. “No es una responsabilidad nuestra, es una decisión del presidente de Estados Unidos que, además, no solo es contra México, sino también contra Canadá y China”, señaló.
La mandataria destacó que, de mantenerse los aranceles, México tendrá que responder. “Es un asunto de dignidad”, afirmó. Además, mencionó que varias cadenas comerciales en Estados Unidos, como Target, ya han advertido que los precios de los productos subirán de inmediato. “No es sencillo decir: ‘dejo de comprar allá para comprar acá’ de un día a otro. Van a seguir comprando a México, y a esa compra que hacen de México tienen que ponerle el 25 por ciento que corresponde a los aranceles”, explicó.
Sheinbaum también resaltó la integración de las economías de ambos países, señalando que la industria automotriz y otros sectores en Estados Unidos han expresado su descontento con las medidas arancelarias. “Ayer hubo gobernadores de distintos partidos políticos, no solo demócratas, que no estaban de acuerdo porque iba a afectar a Estados Unidos”, concluyó.