Agencias/Sociedad 3.0
El publicista y empresario Carlos Alazraki Grossmann tramitó un amparo para evitar ser detenido, argumentando que existe una “ilegal orden de aprehensión” en su contra. En respuesta, un juez federal concedió una suspensión provisional, lo que significa que no podrá ser arrestado por el momento, siempre que los delitos que se le imputen no requieran prisión preventiva oficiosa.
El juez también ordenó a la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México que en un plazo de 48 horas informe si realmente existe una orden de captura contra Alazraki. Además, el empresario deberá pagar una garantía de 10 mil pesos como parte del proceso legal.
El próximo 4 de abril, el juez decidirá si le concede una suspensión definitiva, lo que le daría mayor protección contra una posible detención mientras se resuelve el caso de fondo.