No debieran extrañar los reacomodos en el bloque de Morena-PT- Verde debido a los desajustes provocados por los resultados electorales y la tempranera referencia del tema sucesorio, es un producto de las circunstancias. Las noticias sobre la investigación de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) a la administración chiapaneca, del líder del Verde Manuel Velasco, revelan posibles desajustes entre los socios electorales y legislativos que deberán subsanarse antes del inicio de la próxima legislatura. Igual ocurre con el PT, cuyos dirigentes se oponen abiertamente a la incorporación de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa “porque contradice la promesa de regresar a los militares a los cuarteles”. Pero solo son chispitas para decir acaso que quieren más canonjías a cambio de sus votos en la nueva legislatura, como se apresuró a aclarar el también petista, Benjamín Robles: ““no hay que calentarnos, apenas vamos a arrancar la legislatura y habrá tiempo para discutir estas iniciativas”. ¿Cuál calor?