Con gritos de “fuera” y “corrupto” el líder nacional de Morena, Mario Delgado, fue recibido por la militancia del partido en Durango, cuando asistió al evento en el que se designó a Marina Vitela como precandidata de su partido a la gubernatura de la entidad.
Un grupo de seguidores del senador Ramón Enríquez, quien no logró que el partido le diera la precandidatura, corearon el apellido del legislador y pedían la salida de Delgado.
Durante el evento Mario Delgado aseguró que el nombramiento de Vitela es parte del proyecto que busca llegar a la paridad de género en los órganos de gobierno.
Militantes inconformes con el nombramiento de Vitela calificaron la precandidatura como imposición.
En redes sociales circularon videos en los que se observa que, a la salida del evento de Morena, los inconformes le lanzaron huevos y abucheos a Delgado.
“Estamos muy orgullosos que la gente haya decidido que una mujer de principios, de valores, con experiencia de gobierno, comprometida con el proyecto de Transformación, sea la encargada de dirigir el proyecto”, dijo Delgado sobre la precandidata única por el gobierno de Durango.
Llamó a sus militantes a quedarse “del lado correcto de la historia”, dejando de lado los intereses personales para trabajar en unidad por Durango.
Antes de la visita del dirigente nacional de Morena a Durango, el senador Enriquez, quien buscaba ser candidato para la gubernatura de la entidad, pidió no dejar que “la mafia del poder” tomara decisiones al interior del partido.
Enríquez impugnó la decisión de Morena ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Las precandidaturas de Durango y de Oaxaca de Morena están envueltos en reclamos de los militantes de Morena.