NO TARDÓ ni la víspera, pues la Suprema Corte de Justicia de la Nación, resolvió finalmente que el delito de ultrajes a la autoridad, no es constitucional, echando por tierra la propia aprobación del domingo pasado, en el congreso local, donde se pretendía mantener este delito en el código penal, con la desaparición de solamente dos fracciones del numeral 331, muy a pesar de que las opiniones eran generalizadas en el sentido de que debía desaparecer todo el texto, en cuyo contenido se han respaldado las decisiones gubernamentales para la persecución de políticos, periodistas y todos aquellos ciudadanos que no concuerdan con la política de la cuarta transformación.
Incluso, en el dictamen aprobado por los legisladores de la mayoría en el congreso local, también se negaba en los artículos transitorios, todo beneficio para las personas que ya habían sido procesadas por este delito, a fin de que pudieran permanecer detenidas en los reclusorios de la entidad, lo que contravenía el principio de retroactividad jurídica, pensando, quizá, en que varios de los que se encuentran en esta condición, son políticos que indeseables para este gobierno.
La Corte, finalmente, desestima estas reformas, alegando razones de imprecisión y considerándolas como inconstitucionales, con lo que, de plano, se le da un macanazo al delito en cuestión y se restablece el orden jurídico en Veracruz, pues el gobierno del Estado, había modificado los lineamientos de este artículo penal, hasta volverlo grave y por lo tanto, asegurar la prisión de las personas que lo cometieran, sin derecho a fianza, lo que ha ocasionado que más de mil personas se encuentren detenidas bajo la aplicación de este delito.
Este lunes, cuando menos en este asunto, ya se respira un ambiente diferente y los mismos profesionales del derecho, han coincidido en que comienza a hacerse justicia en territorio veracruzano, pues con esta declaración de la Suprema Corte de Justicia de la nación, tendrán que ajustarse los procedimientos para que las personas que se encuentren detenidas por este delito, comiencen a dejar la prisión. Sin embargo, quedarán todavía, aquellas estrategias de carácter político judicial, que buscarán la forma de que se integren nuevas acusaciones por otros delitos, pues el gobierno estatal, no se quedará quieto ante golpe jurídico que trasciende, necesariamente, en el ámbito político estatal.
Finalmente, es de citarse que el proyecto elaborado en la Suprema Corte de Justicia de la nación, fue elaborado por el ministro veracruzano, nacido en esta capital, Jorge Mario Pardo Rebolledo.
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QUE SE IRÁ, DICE EL PRESIDENTE.
TAL VEZ, IGNORANDO que la constitución general de la república, establece seis años para el ejercicio de su gobierno, el presidente de la república, ha insistido de que se irá en cuanto termine sus funciones, es decir, que manda entre líneas, el mensaje de que no prolongará su mandato, como tantas veces se ha comentado en su afán de continuar en el poder, sobre todo, en el cumplimiento de su proyecto político.
Y no dice nada respecto de lo que manda la constitución, sino sencillamente que ya se siente cansado, por lo tanto, no intentará seguir buscando más posiciones políticas ni nada por el estilo. La pregunta de la mayoría de mexicanos, es en el sentido de que en caso de sentirse bien y que el cansancio desaparezca en el futuro, ¿volvería, entonces, a buscar la posibilidad de quedarse un tiempo más al frente del poder ejecutivo?
Hasta este momento, todo apunta a que ha venido preparando esta posibilidad, donde, incluso, le ha dado al ejército innumerables concesiones con la finalidad de evitar, en todo caso, un posible golpe de estado, que él mismo ha referido en algunas ocasiones, como el impedimento a sus propósitos políticos, faltándole, solamente, lo que pudiera suceder en el congreso federal, donde tendría que someterse a la decisión legislativa de una mayoría aprobatoria.
Sin embargo, las pretensiones iban más allá, por el solo hecho de contar con una mayoría de su partido, pero que finalmente no le alcanzaría para lo que tiene o tenía proyectado, por lo que ahora, solamente, se declara cansado, como una forma de explicar, desde ahora, que no tiene deseos de prolongar su mandato, mediante una reforma constitucional.
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PREVALECIÓ LA RAZÓN, DICE MARLON.
DESDE LUEGO, que las reacciones en todos los sectores de la población veracruzana, no se han hecho esperar, luego de conocer la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la nación, que desechó, finalmente, las reformas del congreso local, apenas el domingo pasado, relativas al delito de ultrajes a la autoridad, donde se pretendía, solamente con dos fracciones, seguir engañando al pueblo veracruzano.
Como se sabe, el diputado local y dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional, Marlon Ramírez Marín, fue uno de los más aferrados opositores a estas reformas, negándose, desde luego, a firmarlas, estableciendo, al mismo tiempo, la posición de su propio partido político.
Luego de conocer la decisión de la Corte, el Diputado Ramírez Marín, declaró que se trataba de un día histórico para Veracruz, destacando que prevaleció la razón jurídica en el máximo tribunal de la nación.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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