En México se registraron aproximadamente un 58% de los asesinatos de periodistas en Latinoamérica de 2012 a 2021, de acuerdo con la organización Reporteros Sin Fronteras.
En su informe “Bajo riesgo: un informe inédito de RSF sobre las deficiencias de los mecanismos de protección a periodistas en América Latina”, dicha asociación expone que en México, Brasil, Honduras y Colombia se reportaron 134 de los 139 asesinatos a comunicadores dicho periodo de tiempo.
En el caso de México, la organización reportó 81 periodistas asesinados, sin incluir los cinco homicidios cometidos entre enero y febrero pasados.
“Estos asesinatos sólo son la punta del iceberg de las violencias perpetradas contra la prensa y la forma más visible y extrema de la censura que se aplica de facto contra la información en estos cuatro países”, se lee en el informe publicado este martes.
Otros tipos de agresiones contra periodistas que documentó Reporteros Sin Fronteras son amenazas, secuestros, o detenciones arbitrarias, en las que pueden enfrentarse a procedimientos judiciales abusivos, actos de espionaje o la destrucción de su material de trabajo.
La mayor parte de los asesinatos y agresiones contra comunicadores mexicanos, añade el informe, se concentraron en estados con intensa presencia del crimen organizado. Los reporteros que cubrían noticias locales sobre corrupción, narcotráfico, violencia, seguridad pública y asuntos relacionados fueron las principales víctimas.
“En algunas regiones del país, la violencia y la intimidación fueron perpetradas por grupos armados que aparentemente mantenían vínculos con grupos políticos”, advierte el reporte.
El texto señala que uno de los motivos por los que existe la violencia contra los periodistas en México es que integrantes de diversas dependencias de gobierno figuran entre los mayores sospechosos de crímenes contra la libertad de expresión.
Entre ellas están la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena), la Fiscalía General de la República (FGR) y las Fiscalías de los estados de Veracruz y Oaxaca, citando datos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Pese a que existe un mecanismo para la protección de periodistas, la organización considera que este es insuficiente y tiene fallos en su ejecución. También acusa que el discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador contra los medios de comunicación fomenta las agresiones hacia los periodistas.
Bajo este escenario, Reporteros Sin Fronteras considera a México como el país sin conflicto armado más peligroso para la prensa en todo el mundo.