martes, noviembre 5, 2024

Claudio XXX y Germán Martínez, niños sin amortz

Germán Martínez, del que ya solo se acuerdan Tavo Madero, Santi Creel y Álvarez y Guasa, quienes de por sí no es que hayan dejado una impronta profunda en el alma de la nación, recuperó su memoria calderonista, aplicó un muy guango pero intenso lillytellazo contra López Obrador, a quien hasta hace muy poco se consideraba su padawán. Se diría que salió el kukluxpanista que todos los oportunistas blanquiazulinos, que se treparon a la ola morenista, llevan dentro. Claro, el Germy es un personajillo tan menor que podría vivir en la Casa gris de Lego que presentaron Xóchitl Gálvez y Julen Rementiría que, como dice el periodista Jorge Armando Rocha, es lo único que ha construido la oposición en tres años.

En su filípica-jelípica lo único que le faltó a Germán fue retuitear la encuesta GEA-RISA, como hizo su jefazo Calderón, donde AMLO es menos popular que el Tata Martino (las risas son grabadas) pues, según Federico Reyes Heroles, crecen las voces críticas como las del ChikiliQuadri, Brozo, Loret, Alazraki y varios más que en realidad son los mismos de costumbre. Digo, una encuestadora donde sin importar el tema, siempre gana mi Licenciado Peña en inteligencia, está difícil tomarla en serio.

Bueno, es como hacerle caso a las razones que esgrime Chepina Vázquez Mota para no votar a favor de la Reforma eléctrica, sobre todo porque a juzgar por su onda post apocalíptica con Armagedón incluido, cualquiera diría que iba disfrazada de odontóloga-virópata. Mejor hubiera aparecido como Alberto Peláez, que llegó a la Mañanera ataviado de Pedro de Alvarado para vender tiempos compartidos en Iberdrola.

Algo que solo es superado por los chorromil tuits que arroja mi Claudio XXX González como si fueran rollos de papel de baño, donde entre otras maravillas (dice que la 4T ha robado más que Peña, lo cual es material imposible) nos quiere hacer creer que le importa el futuro de los mexicanos, agazapado en su palacete de Las Lomas. Todo esto no sonaría tan hueco si el junior no hubiera complotado para manipular el precio de los pañales y las toallas sanitarias, además de mover influencias salinescas para no pagar impuestos.

Ese Germán Martínez estaba muy muino porque al igual que a mi Tatankita Córdova y Ciro Murayasamí, es un demócrata al que no le gusta la muy democrática consulta popular sobre la Revocación de Mandato.

El más creíble Luis de Llano declarando que no ha cometido delito alguno.

otros columnistas