Agencias/Sociedad 3.0
50 personas muertas, decenas de lesionados y un sacerdote secuestrado fue el saldo que dejó un ataque en una iglesia cuando se celebraba una misa matutina en Nigeria.
Esta tragedia se suscitó en la iglesia católica de San Francisco situada en la ciudad de Owo, al suroeste el país, en donde se presume que este tipo de acciones son muy poco habituales .
Las autoridades corroboraron que cinco sujetos armados ingresaron a la parroquia, secuestraron al sacerdote y accionaron las armas de fuego contra los feligreses.
Añadieron que los lesionados fueron atendidos en hospitales en donde se informa que las heridas de los sobrevivientes son muy graves por lo que el número de víctimas podría aumentar.
En tanto que el presidente nigeriano, Muhammadu Buhari, lamentó el fallecimiento de las víctimas y calificó el hecho como un asesinato odioso de fieles, advirtiendo pena eterna para los atacantes en la tierra y en el más allá.