Agencias/Sociedad 3.0
La bailarina, coreógrafa y cyborg española Moon Ribas se hizo mundialmente conocida por implantarse en los pies unos sensores sísmicos que le permiten percibir los movimientos de la tierra cada vez que hay un temblor y ella lo transmite con su cuerpo a través de la danza.
“Cada vez que hay un terremoto, me muevo según su intensidad. Es un dueto entre la Tierra y yo, la Tierra es la coreógrafa y yo sólo soy la intérprete. Si no hay terremotos, no me moveré, aunque usualmente hay”, explica.
Originalmente hacía esta danza con implantes en sus plantas de los pies, pero después de siete años los retiró buscando un cambio radical.
¿Qué es un Cyborg?
Un cíborg es un ser o criatura formado por materia orgánica y dispositivos tecnológicos (cibernéticos) que tienen por objetivo mejorar las capacidades de la parte orgánica.
Por ejemplo, cyborgs pueden ser las personas con brazos o piernas robóticas mucho más fuertes y precisos que los de una persona normal. También podrían ser las personas con microchips en su cuerpo. Incluso, desde una visión amplia, también lo serían las personas con marcapasos.
Moon Ribas, la primer mujer cyborg
Moon Ribas nació en 1984 en Barcelona y desde 2007, hace proyectos en tecnología con el objetivo de querer percibir más de lo que la naturaleza humana permite.
“Empecé a hacer varios proyectos, uno que me hacía saber a qué velocidad iba la gente, el otro que podía percibir lo que tenía detrás y otro que me dejaba percibir el movimiento de la tierra en sí y cree el sentido sísmico. Entonces al unirme a la tecnología, fueron las otras personas que empezaron a decir que era cyborg y empecé a cuestionarme que quizás sí, que soy medio organismo y medio cibernética. Ahí fue cuando empecé a pensar en esta identidad cyborg y en que no soy 100% humana”, cuentó para El Universal.
El vivir durante años percibiendo sismos, cambió la perspectiva de temor que tenía Ribas hacia los movimientos telúricos: “me di cuenta de lo viva que está la Tierra y me sorprendió cómo es que construímos ciudades en sitios que todo el tiempo se está moviendo”.
La primer Cyborg embarazada
En la búsqueda de un nuevo proyecto relacionado con el mar, Ribas se embarazó y ahora ha adquirido “un nuevo sentido” para que ella y su pareja puedan escuchar dentro de su vientre.
“Es un micrófono ultrasonido conectado a un móvil (teléfono celular) y con este puedo llamar a mi pareja o él puede llamar y escuchar cómo su hijo se va moviendo, el latido de su corazón, los líquidos amnióticos… es como si él estuviera embarazado digitalmente y yo biológicamente. Lo que hacemos ahora es que ofrecemos conciertos de familia cyborg, ponemos altavoces y creamos música usando nuestros cuerpos como instrumentos”, explica.
Moon Ribas sostiene que el identificarse como cyborg no le resta humanidad ni la pone en un escalón superior a la naturaleza.
Paradójicamente, esta nueva identidad ha hecho que se estreche su relación con la Tierra: “a veces se tiene esta imagen muy fría del cyborg, pero para mí es todo lo contrario, gracias a la tecnología puedo sentir lo viva que está la Tierra”.
También contrario a lo que uno podría imaginarse, Ribas no se considera una aficionada a la ciencia ficción e incluso destaca que durante su juventud se consideró “antitecnología”.
“Esto fue como un cambio de chip para mí, yo también tenía la sensación que la tecnología te aislaba de la realidad, pero fue cuando en la universidad aprendí que a través de la tecnología puedes tener una conexión más profunda y conocer mejor el planeta donde vivimos”.