Agencias
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio el tradicional grito de la independencia de México en la noche de este 15 de septiembre en medio de una multitud que coreó vivas y celebró un año más la festividad mexicana.
Desde el balcón presidencial de Palacio Nacional, luego del concierto presentado por los Tigres del Norte, López Obrador arengo con los tradicionales “vivas” y luego se lanzó contra la corrupción, el clasismo y el racismo.
López Obrador apareció minutos antes de la media noche de este jueves 15 en el balcón del Palacio Nacional y dio vivas a personajes de la independencia, pero esta vez añadió algunas arengas a este grito: «¡Muera la corrupción, muera el clasismo, muera el racismo!», dijo el mandatario, mientras miles de mexicanos celebraban en el Zócalo, la principal plaza pública de Ciudad de México.
El mandatario estuvo acompañado de su esposa Beatriz Gutiérrez Müller.
Las celebraciones por el Día de la Independencia dieron inicio en punto de las 20:50 horas, con la presentación de Los Tigres del Norte en el Zócalo, frente a miles de ciudadanos que empezaron a llegar desde la tarde.
Durante la ceremonia y después de ella, las autoridades de la Ciudad de México mantienen un operativo con más de 3 mil policías y alcoholímetro en distintos puntos de la capital.
Corcholatas, en el Grito
El Presidente estuvo acompañado de sus invitados, entre los que estuvieron las denominadas corcholatas que compartieron el mismo balcón.
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México Claudia Sheinbaum Pardo compartió a través de sus redes sociales la fotografía en la que aparece con sus posibles competidores al puesto de candidato presidencial 2024 de Morena.
A la izquierda se encuentra Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación junto a su esposa, Dea Isabel Estrada Rodríguez; al centro está la mandataria Claudia Sheinbaum con su pareja, Jesús María Tarriba Unger; finalmente, al extremo derecho está el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (Segob), Marcelo Ebrard Casaubón y su esposa, Rosalinda Bueso.
Algo que llamó la atención fue que tanto el secretario de Gobernación como la jefa de Gobierno capitalino hicieron la señal de la Cuarta Transformación (4T) con la mano derecha, mientras que el canciller se quedó con ambas manos a la altura del barandal.
También fue notable la ausencia del senador de la República, Ricardo Monreal Ávila, quien ha señalado que le parece ofensivo que se les llame corcholatas a los aspirantes a la candidatura presidencial del partido. A pesar de que ha expresado sus intenciones, no ha destacado como sus compañeros morenistas.
Al momento de esta publicación Ebrard Casaubón no ha mencionado nada sobre su invitación al Grito, en tanto Adán Augusto compartió la proclama del presidente López Obrador en un video de un minuto de duración.
Los invitados internacionales de López Obrador también tuvieron su propio espacio para ver desde un lugar privilegiado la ceremonia patria.
En otro palco estuvo, de izquierda a derecha: Luis Cresencio Sandoval González, Secretario de la Defensa Nacional (Sedena); José Rafael Ojeda Durán, Secretario de Marina (Semar); José Alberto Mujica, expresidente de Uruguay; Evo Morales, expresidente de Bolivia; Aleida Guevara, hija del revolucionario cubano Ernesto ‘Che’ Guevara; Gabriel Shipton y Jhon Shipton, padre y hermano del programador y fundador de WikiLeaks, Julian Assange, quienes asistieron en su representación.
En un balcón distinto, también asistieron los familiares del activista César Chávez: Sylvia Chávez Delgado, Elizabeth Chávez Delgado, Eloisa Chávez Delgado, Paul Chávez y Anthony Fabela Chávez. Así como Martin Luther King III junto con su esposa.
En la lista de invitados también figuró Noam Chomsky, lingüista estadounidense y uno de los filósofos más influyentes en la actualidad que hasta el momento no ha confirmado su presencia en México en fechas venideras.
Por otro lado, la familia del activista y premio nobel de la Paz, Nelson Mandela, también fue invitada a la ceremonia; sin embargo no asistieron a la festividad que esta edición destacó a los migrantes y luchadores sociales.
Luego del tradicional Grito de Independencia, el presidente López Obrador y sus invitados se retiraron para descansar y presenciar por la mañana del 16 de septiembre el desfile cívico militar. Estuvo descartada una cena especial.