El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este martes que la “prueba dolorosa” de que su gobierno lucha contra las mafias y grupos criminales es que están asesinando a militares, que laboran en las regiones más conflictivas del país.
“Se trata de mafias que operan desde hace bastante tiempo, este juicio de García Luna tiene que ver con eso, hay una parte ayer en donde se habla que se les permitió dominar en todo el país, entonces eso, pues ya no se permite, pero quedó como una herencia, dañina”, dijo en su conferencia matutina.
“Existen grupos que se enfrentan, y lamentablemente también se afecta a gente inocente, estamos luchando en contra de la inseguridad, de la violencia, bueno, la prueba y es también, dolorosa, es que están asesinando a militares que están trabajando en esas regiones en las más conflictivas, entonces estamos haciendo todo”.
El sábado pasado, el coronel Héctor Miguel Vargas murió por las heridas sufridas en una emboscada por un grupo de sicarios del narcotráfico en una zona rural del municipio de Coalcomán, en Michoacán.
El coronel Vargas fungía como comandante del 65 Batallón de Infantería con sede en Coalcomán, un municipio colindante con el estado de Colima, donde operan sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cártel de Tepalcatepec y Cárteles Unidos.
En tanto, durante el operativo de recaptura de Ovidio Guzmán López, hijo de “El Chapo“, en Jesús María, Sinaloa, 10 militares murieron y al menos 35 más resultaron heridos, informó el general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional.
Además, el comandante Juan José Moreno Orzua y tres elementos del 43 Batallón de Infantería fallecieron tras una agresión armada en Escuinapa, Sinaloa, durante los operativos de seguridad en el estado tras la reaprehensión de Ovidio Guzmán.