Agencias/Sociedad 3.0
Una estampida en vísperas del final del mes sagrado de ramadán dejó al menos 78 muertos y 139 heridos en la ciudad yemení de Saná, en una de las peores catástrofes no relacionadas con el conflicto en el país ya sacudido por sufrir la peor catástrofe humanitaria del planeta.
El Ministerio de Salud de los rebeldes hutíes del Yemen afirmó en un comunicado que “a las 20:00 h local del miércoles, la Autoridad del Hospital de Al Tharwa recibió a los heridos de la desafortunada estampida que ocurrió en la capital Saná durante la distribución de sumas de dinero por un mercante”.
La noticia apareció de madrugada cuando los oficiales comenzaron a reportar las víctimas y las imágenes de la gente atrapada en una marabunta empezaron a difundirse en el casco histórico de Saná, la capital controlada por los insurgentes desde que se inició el conflicto en 2014.
Pánico entre disparos al aire
Unos hombres armados que abrieron fuego al aire para dispersar a la multitud que se encontraba en el patio de una escuela en el casco histórico de Saná para recibir un cheque de 5 mil riales yemeníes, el equivalente a apenas ocho dólares en el mercado paralelo, provocó la estampida que ha dejado al menos 78 muertos y decenas de heridos, indicaron a EFE testigos y vecinos del barrio.
La tragedia tuvo lugar en una escuela gubernamental en la ciudad antigua de Saná en la que estaban repartiendo esos cupones de dinero en un evento organizado por un destacado hombre de negocios, identificado como Mohamed al Kaboos, según las mismas fuentes.
La multitud estaba agolpada en el patio de la escuela Al Maeen cuando los hombres armados dispararon al aire para dispersar a la gente, lo que provocó que intentaran huir por la puerta de la escuela y provocara la estampida, dijeron los testigos, que pidieron no ser identificados.
El portavoz del Ministerio del Interior hutí, general Abdul Khaliq al Ajri, consideró lo ocurrido como un “trágico y doloroso accidente en el que decenas de personas murieron a causa de una estampida de ciudadanos durante la distribución aleatoria de sumas de dinero por parte de algunos comerciantes sin coordinación con el Ministerio del Interior”, informó la agencia de noticias yemení de los insurgentes, Saba.
El responsable del ministerio hutí indicó que dos de los comerciantes responsables de este reparto fueron detenidos, mientras que la fiscalía se movilizó de inmediato para investigar lo ocurrido.
Condolencias
Las autoridades egipcias y el enviado del enviado de la ONU para el Yemen, Hans Grundberg, expresaron hoy su conmoción por lo sucedido.
“Toda mi oficina y yo estamos profundamente dolidos y entristecidos por la trágica estampida (…) mis más sinceras condolencias a todos los yemeníes afligidos hoy, y deseo a los heridos una pronta recuperación”, dijo Grundberg en su cuenta oficial en Twitter.
Una postura similar expresó el Ministerio de Exteriores de Egipto, al mostrar su “total solidaridad con el pueblo y el Gobierno del Yemen en esa dolorosa circunstancia”, según un comunicado oficial.
La capital yemení está controlada por los rebeldes respaldados por Irán desde 2014, cuando comenzó un conflicto que obligó al Gobierno yemení reconocido internacionalmente exiliarse a Adén, en el sur del país.
La guerra en el Yemen, a la que intervino en 2015 Arabia Saudita como líder de una coalición militar, ha provocado la peor catástrofe humanitaria en el planeta.
Desde hace años, la ONU considera la de Yemen como la peor crisis humanitaria del mundo, con más de 23 millones de personas necesitadas de asistencia, como consecuencia de la guerra que mantienen los hutíes, el Gobierno y sus aliados, y de la pobreza imperante en el país.
Con información de EFE