Política Cero
Jairo Clixto Albarrán
Cosas que te devuelven la fe en la humanidad: que Sandra Baticuevas tenga su propio pecado de Oyuki, así nombran a la señora que lo mismo es su guarura, nana y grupo de choque; que Alejandra del Moral -que es un muchito inmoral—se comprometa a una agenda que hace ver a Donald Trump y al góber de Florida prácticamente como comunistas; que Adela Micha defienda a Calderón como hubiéramos querido que Jolopo hubiera defendido al peso, cuando la Reina del Pacífico afirmó que el expresichente Jelipillo estaba relacionado con el narco; que Julen Rementiría, el senador del KukluxPAN más voxista y yunquistta que ninguno, quiera dar un golpe de Estado tipo la boluda de Boluarte, para que luego Denise Maerker haya dejado con cara de what a sus camaradas de Tercer grado cuando dejó barrido y trapeado a Darth Larrea por estar poseído por la fuerza no oscura, oscurísima, mientras justificaba las acciones de AMLO en el tema ferroviario y estos ya le querían ir a bolear los cacles al milloneta.
Grandes maravillas de nuestro tiempo que, a pesar de su notable capacidad para generar cariño y admiración, palidecen ante el anuncio de que un probo y morigerado Alitititito Moreno va por la candidatura. Y que si el pobrecito de Markitititito quiere un millón de firmas para conseguirla, que él puede conseguir mucho más. Me lo imaginé corriendo en su kilo de maclaren no es maclaren con Margarita Zavala para pedirle un tutorial para sacar más y mejores fotocopias.
El problema de Alito, Mr. RoBotox, es que es un político muy hambreado, sobrado y malvado, que se siente el muy muy comparándose solamente con sus competidores de sector y de partido que, ciertamente, están pa’l perro. Todo mientras Kinky Téllez, en plan ninja-creepy, se sigue peliando con Santi PRIL que, fiel a su facilidad para el humor involuntario, afirmó con su cara de toro loco que si se trata de ganar la candidatura, al son que le toquen baila: rumba la zumba o hasta rap. Yo digo que si el señor Constituchon baila reguetón y perrea muy hot, que lo hagan candidato.
De todas estas ondas mafufas lo que más me tiene muy intrigado es por qué Marchelo Ebrard se sigue relacionando con Ricardo Monreal. Solo le produciría más desprestigio que un aciago día Calderón le de un like. ¡Qué necesidad!
Muy volado Markititito Cortés al exigirle tantas firmas a sus candidotes, ni todos los prianchuchistas juntan un millón de amigos para así más fuerte poder atracar.