Por Edgar Hernández*
Este arroz ya se coció.
Los primeros sondeos internos realizados en Veracruz por el Frente Amplio por México, FAM, que cuenta con el apoyo ciudadano y el respaldo de los partidos políticos opositores PAN/MC/PRI y el PRD, colocan a José Francisco Yunes Zorrilla a la cabeza de la nominación de la candidatura por la gubernatura a disputarse en 2024.
Mientras el aspirante concluye -en la víspera de solicitar licencia a la diputación federal que encabeza- un recorrido por los 212 municipios de la entidad veracruzana luego de ocho meses de largo peregrinar recogiendo demandas ciudadanas.
Pepe, como coloquialmente se le conoce, eventualmente habrá de enfrentar electoralmente a la candidata opositora de Morena, Rocío Nahle, lo cual le da considerable ventaja dada la fama pública de corrupta de la funcionaria y el fracaso de la administración de Cuitláhuac García.
En paralelo, círculos capitalinos muestran clara simpatía por Pepe Yunes y, de acuerdo al periodista Carlos Loret de Mola, en reunión urgente en días pasados en Palacio Nacional entre el López Obrador y su grupo político más cercano, se reveló la inminente derrota electoral de Morena en Veracruz, tercera reserva electoral de la república.
El Frente Amplio por México -FAM- aun cuando sus trabajos en este momento están enfocados en la selección de su candidata ciudadana, que todo indica habrá de inclinarse por Xóchilt Gálvez, ya hizo sus primeros análisis demoscópicos internos en Veracruz en donde se muestra una clara simpatía por Pepe.
El propio Partido Acción Nacional en Veracruz, que ha hecho manifiesta su postura de solicitar encabezar el proceso de selección de su candidato se ha manifestado abierto a apoyar a quien tenga el mayor respaldo ciudadano aun cuando no provenga de las filas azules.
En igual sentido Movimiento Ciudadano ha expresado en corto su simpatía por Pepe, a pesar de que desde hace unas semanas anda haciendo proselitismo Juan José del Río Virgen, consciente de que no le alcanza para ganar la gubernatura, pero si para representar a Veracruz en el Congreso de la Unión.
Y con el PRD, partido bisagra, Pepe tiene diálogo fincado en el respeto al igual que con el PRI que en estos momentos está a la espera de los tiempos del cambio de su dirigencia.
Todo en el entendido de que la fuerza política de Pepe se finca en el respaldo ciudadano obtenido a lo largo de casi un cuarto de siglo de transitar en cargos de elección popular más que en la administración pública.
Las próximas semanas serán cruciales al definirse, tanto de parte del partido en el poder, Morena, como del Frente Amplio por México, quienes serán sus candidatos en disputa.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo