Agencias/Sociedad 3.0
Hoy, un dron cargado de explosivos impactó dentro de la base militar Al Harir en el norte de Irak, donde se encontraba personal estadounidense. Afortunadamente, el ataque solo causó daños materiales en uno de los edificios, sin provocar víctimas mortales ni heridos, según informó una fuente de seguridad kurda a EFE.
La acción fue rápidamente reivindicada por la Resistencia Islámica en Irak, un grupo de milicias proiraníes que ha intensificado sus ataques contra instalaciones que albergan fuerzas estadounidenses en Irak y Siria en las últimas semanas. Este incidente forma parte de una serie de más de 60 ataques llevados a cabo por estas milicias desde mediados de octubre, en el marco de la creciente tensión en la región, especialmente relacionada con la situación en la Franja de Gaza.
A pesar de los esfuerzos diplomáticos del primer ministro iraquí, Mohamed Shia al Sudani, para detener estos ataques, la Resistencia Islámica en Irak ha continuado con sus acciones, desafiando las advertencias de Estados Unidos. El secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, visitó recientemente Bagdad para reiterar la determinación de su país de proteger a su personal en Oriente Medio.
Con información de Infobae