En su reciente encuentro con una delegación de alto nivel de la administración de Joe Biden, el mandatario mexicano presentó cuatro puntos cruciales para abordar el fenómeno migratorio.
Estos incluyen destinar 20 mil millones de dólares para el desarrollo de América Latina y el Caribe, regularizar a al menos 10 millones de hispanos trabajadores en Estados Unidos, suspender el bloqueo económico y financiero a Cuba, y levantar todas las sanciones contra Venezuela.
«Varios gobiernos de América Latina están en contra de estos traficantes de personas, nos han pedido que actuemos de manera conjunta para desmantelar estas bandas porque son muy irresponsables, no cuidan a los migrantes, además que cobran, los engañan y en algunos casos tienen relación con políticos de Estados Unidos que alientan la migración para afectar a partidos contrarios, y en el caso extremo también vinculación con bandas de la delincuencia», denunció el presidente.
AMLO subrayó el compromiso de México en abordar el tema migratorio mediante acciones de contención en la frontera sur y la implementación de programas sociales en países de Centroamérica y el Caribe. Estas acusaciones resaltan la complejidad y las dimensiones políticas que rodean la migración, destacando la necesidad de una cooperación internacional más estrecha para enfrentar esta problemática.