Política cero
Jairo Calixto Albarrán
Se les dijo, se les dijo a los chicos y chicas de la oposición que se hicieran una limpia, que se aplicaran un exorcismo extremo, pero no hicieron caso. En estos días gozaban con el pequeño deslizamiento del peso y vaticinaron un apocalipsis por doquier mientras hacían ñaca ñaca. Pero lástima, Margarita Zavala, el peso se fue recuperando a pesar de los ritos satánicos de los patitas de molcajete de la oposición. Es lo malo de hacerle caso a los chumeles de la economía.
Y para colmo la esperanza de que el Tribunal declarara ganadora a Xóchitl Gálvez se les fue al infierno. Y por si eso fuera poco, el Tribilín revocó la sanción a López Obrador por las 36 mañaneras.
Para rematar, el juez Cogan le dio en su máuser a la posibilidad de un nuevo juicio para García Luna Producción, orillándolo a que termine cantándolo todo como en Garibaldi. El ex presichente Jelipillo, me dicen, se acabó su dotación de Bacachá del susto nada más de imaginarse que lo eche de cabeza su compadre favorito. Pero como el Sr. de la Narcoguerra no se quiere desprestigiar solo, se puso a apoyar a la María Corina que nos quiere gobernar. Solo a él se le podía ocurrir exigirle a la próxima presidenta que convirtiera a la opositora venezolana en heroína bolivariana. #NoMaMarx.
En su desesperación y en su ánimo por pegarle como sea a la Cuatroté, la derechairiza se fue con todo contra Ana Guevara. Si bien tuvo lo suyito y algo de soberbia durante su gestión (una campeona olímpica como ella tenía que haber tenido mucho mejor papel frente al deporte nacional), ya mero me la culpan de haberle metido la pata a Alexa Moreno y de la desaparición del PeRDeré que como Cleto murió, murió, murió. Hasta parecía que los santones del periodismo deportivo, que en otros sexenios le boleaban los zapatos a la Conade, querían extorsionar a la Guevara como pasó con Rocío Nahle. Lo gacho es que se les cayó el teatrito cuando apareció un video en el que Osmar Olvera, el doble medallista y héroe del momento, le agradecía a Ana Guevara el apoyo. Y para rematar, Ma Jin, la entrenadora nacional de clavados, también hizo lo propio. Nada les sale ni bien ni bonito a los voxistas.
Algo comparable en toda su ridiculez con el minion calderonícola Germán Martínez, amenazando con no asistir a la toma de posesión de Sheinbaum si Putin llegara a acudir a tan magno evento. Seguramente la doctora debe estar temblando de miedo.
Amigas, amigos, amigues, amiguis derechairos, disfruten lo votado.