Agencias/Sociedad 3.0
Durante 20 años, hasta 2016, el Vaticano invirtió en una multinacional vinculada a la producción de las pastillas ‘del día siguiente’ que evitan embarazos involuntarios. La revelación, realizada por el programa Report de la televisión pública italiana RAI y retomada por el diario Il Fatto Quotidiano, procede de Libero Milone, el primer revisor general de las cuentas de la Santa Sede, nombrado por el papa Francisco en 2015.
Milone, quien dos años después de su nombramiento abandonó su puesto en El Vaticano denunciando que había sido obligado a hacerlo tras descubrir asuntos turbios y recibir amenazas, explicó que la Secretaría de Estado fue accionista de la industria farmacéutica Sandoz/Novartis, productora de la mencionada píldora.
“Ese fue uno de los nombres que vi”, dijo tras ser preguntado por estas inversiones que, según la reconstrucción hecha, llegaron a alcanzar unos 20 millones de euros.
En concreto, el organismo vaticano habría adquirido las acciones de esta empresa a través del APSA, el ente que administra parte del patrimonio del Vaticano. Un negocio que continuó hasta que, en 2016, fue reconocido el error, como también confirmó a Report Ferruccio Panicco, exrevisor adjunto del Vaticano.
“Esas acciones fueron luego vendidas”, precisó Panicco, al añadir aún así que “cuando uno mira solo al beneficio se olvida de otras cosas”.
Contactado por Il Fatto Quotidiano, monseñor Nunzio Galatino, presidente de APSA desde 2018, se negó a entrar en detalles del caso y se limitó a decir que “en 2016 él no estaba en APSA”, a la vez de que defendió que las inversiones vaticanas de hoy siguen “criterios éticos”. “No sé qué divulgó Report, es un programa que no sigo”, añadió Galatino.
La posición del Vaticano sobre la píldora del día siguiente no ha cambiado mucho en las últimas décadas.
Si bien los Papas no se han pronunciado sobre el tema claramente ni han emprendido batallas incendiarias para impedir su uso, la posición de la Academia Pontificia de la Vida, organismo vaticano que se ocupa de estos temas, quedó plasmada ya desde el año 2000 en un documento que explica cuál debería ser el comportamiento de los católicos ante el uso de la píldora.
En concreto, se pide a los operadores sanitarios de recurrir a la objeción de conciencia a la hora de encontrarse en la situación de tener que vender o entregar estas pastillas a las personas que las solicitan.
La revelación también arroja una nueva sombra sobre el cardenal italiano Tarcisio Bertone, secretario de Estado vaticano en los años de la inversión, y cercano al cardenal Domenico Calcagno, quien en la época manejaba el APSA.
No obstante, el caso es quizá también uno de los más curiosos de una larga lista de escándalos que han sacudido a las instituciones económicas y financieras del Vaticano en las últimas décadas.
Report es uno de los programas de investigación más serios de Italia, y a menudo ha revelado tramas que han hecho temblar a las elites políticas y económicas de este país. Aún así, según algunos observadores, difícilmente la noticia habría sido emitida por la RAI sin la aprobación de altos cargos del Vaticano.