A solo unas horas de ser invadidos, pareciera que los ucranianos no ven las noticias ni leen los Diarios, pues los Ejércitos rusos están ya en la frontera con Ucrania y llevando a cabo prácticas de tiro…
Vaya; ya hasta el ajonjolí de todos los moles, Ebrard, se dijo estar listo para evacuar a los mexicanos residentes de por allá. Ignorando -gracias a la propaganda- que en caso de la invasión rusa, correrán menos peligro si se quedan allá, que si se los traen a este México de muchos balazos y pocos abrazos…
Si los trae, insistan en que los lleven a Yucatán, al cabo y son pocos. Pero opónganse a que los lleven a Guerrero, a Michoacán, a Veracruz, a Tamaulipas, Zacatecas, SLP, etc. y menos a Colima, del que poco se habla; pero desde que en Chapala le dieron de tiros a quien tenía controlada la Plaza, el asunto está que arde…
El caso es que ya todos -bueno, no todos- están ciertos de la invasión; menos ellos pues su Ministro de Defensa, Alexéi Révznikov, declaró que “la situación no es alarmante y no hay motivos para imponer la Ley Marcial”…
Y de Francia, el Ministro de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, en un programa de cadena nacional, declaró que “nada indica que el Presidente Putin vaya a invadir Ucrania
Parece mentira que en México estemos enterados de la invasión y ellos no tengan ninguna noticia; y más estando tan cerca. Los van a agarrar como al Tigre de Santa Julia. Bueno; pues que conste que les advertimos.
Cambiando de tema…
El que ya no la está viendo tan fácil, es el Primer Ministro de Canadá Justin Trudeau, quien ha tenido que invocar, por primera vez en la Historia de la Nación, “La Ley de Emergencia”; que le dará al Gobierno “herramientas adicionales” no sujetas a las Leyes. El problema es que no sabe con quienes se metió; con que apaguen los motores y se queden donde están, será suficiente para doblegarlo ante sus protestas por la vacunación que no aceptan…
Y al mismo tiempo, siguiéndole el juego a los yanquis, informó que proporcionará armamento “letal” a Ucrania por unos 6 millones de dólares.
Ya de salida…
La división interna que hay en Morena, se debe a que don Manuelito -de quien ya hablan que lo mismo, dado su frágil estado de salud, no termina su mandato- los cooptó, los sedujo, los cuenteó, los engatusó, vayan ustedes a saber amables lectores; pero lo cierto es que su Partido, es una olla de tamales…
En la que hay de chile, de mole, de pollo, de frijolitos, de pata, de sesos -de estos ya no hay-, de puerco -los más gustados- y por supuesto, los de moda: ¡de chipilín! Y que hoy, cuando la nave de la 4T ha sido torpedeada en las líneas de honradez y corrupción y haciendo agua; sus integrantes se pelean entre ellos para ver quienes se suben a los botes salvavidas…
El naufragio es inminente; pero los despiadados con los que se ha peleado, lo van a seguir torpedeando, hasta que del buque de la ilusión, perdón, del bienestar, el de los abrazos y no balazos, repose en el fondo del mar de mentiras, de los insultos y de hipocresía, dejarán de dispararle. Lo quieren terminar; y nadie querrá ser su sucesor…
Pues el señor Presidente ha llevado a la Patria a una dolorosa división: los fifís vs los chairos. Suena hasta chistoso, pero es grave, muy grave. Quienes han dividido a sus ciudadanos, dice la Historia que no han terminado bien…
Por cierto, que anticipándose a la pichada, el señor Presidente, antes de que le saquen más trapitos al Sol de su prole, dijo que su hijazo de su vidaza, trabaja en una empresa relacionada con uno de sus asesores, en el Tren Maya; pero que no hay conflicto de intereses porque no les cobra; que con lo que tiene la nueva le basta y hasta le sobra…
Y en una carta que se hizo pública, con cierto tufo a cuando La Gaviota declaró que la casa Blanca la había comprado ella; su hijo y su nuera explicaron cuáles son sus relaciones laborales. Mientras él continúa su pleito con los periodistas y nos dice de todo. Es un pelado…
Sin embargo, imaginemos que si termina su mandato, pero que no puede imponer su candidato, o candidata; y que los tres grandes PRI, PAN y PRD le ganen las elecciones. Aunque los muy baquetones digan que esas alianzas son válidas; al mismo tiempo reconocen que solos no la podrían hacer; que hay que unirse…
Que, mejor dicho, no sería unirse, sino coludirse, es decir, unirse en perjuicio de un tercero. Pero sus ideologías son diferentes, por no decir antagónicas -las del libro ¡claro! en el fondo lo que todos quieren es dinero y poder. ¿O de verdad piensan amables lectores que quieren servir al Pueblo? Esos son garbanzos de a libra…
Al llegar, volvería a pasar lo mismo que ahora pasa en Morena, cada cual va a jalar para su conveniencia y vamos a regresar a los mismo. Y como no vivimos en un Estado de Derecho; ¡Y ni a quién recurrir!
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida