“Ganamos con Tokio, logramos el ‘tres de tres’, no queda duda que Veracruz es Morena”, decía hace tres semanas el diputado local y coordinador de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, Juan Javier Gómez Cazarín, uno de los artífices del sorprendente resultado electoral obtenido por Morena en la jornada electoral del 6 de junio. Sin embargo, hoy el gozo podría irse al pozo.
Gómez Cazarín podría ser el único damnificado del tsunami morenista, a menos que los buenos oficios del palacio de gobierno y el Congreso apliquen como consecuencia de la plenitud del “pinche poder” y se ataje la intención del OPLE de elaborar un proyecto de acuerdo para que su Consejo General apruebe una distribución que garantice la integración paritaria de la próxima Legislatura.
Es difícil pensar que los Consejeros electorales –algunos de ellos alineados abiertamente a Morena- soporten la presión y se mantengan bajo el criterio de que deben ser sólo los partidos Morena y el PAN quienes sacrifiquen a los hombres de su lista de candidatos plurinominales para así alcanzar un número paritario de 25/25 en la próxima Legislatura.
Será un Congreso donde además Morena mantendrá un control absoluto, no sólo para el gobierno interno sino para todo lo que tiene que ver con el Poder Legislativo: Presupuestos, nombramientos de integrantes de otros poderes y organismos autónomos, reformas constitucionales, control de los Ayuntamientos, revocación de mandatos, entre muchísimos otros temas que serán de mero trámite.
Sin embargo, la suerte de Gómez Cazarín y quienes integren la Legislatura por la vía plurinominal no estará echada en el acuerdo del OPLE. Tendrá que recorrer un largo camino de impugnaciones ante los tribunales electorales, primero el que compete a Veracruz, pasando por la sala regional del TEPJF hasta terminar en su Sala Superior. Serán muchos los intereses que confluyen en cada instancia.
¿Cómo llegamos hasta este punto? ¿Cómo podría quedar fuera quien busca repetir en el cargo, y con ello, mantener el manejo absoluto del Congreso? Pues es el resultado de las múltiples reformas que buscan encontrar una equidad de género que no corresponde necesariamente a la voluntad de los votantes.
Esa es la razón por iniciar lo antes posible una nueva reforma electoral que los libere de estos riesgos. Desaparecer a los diputados plurinominales no sólo garantizaría mayorías calificadas, sino que eliminarían la discrecionalidad de los organismos electorales y los partidos políticos.
La razón por la que Gómez Cazarín podría quedar fuera de la próxima Legislatura es porque fueron 18 hombres y 12 mujeres quienes que ganaron sus respectivos distritos de mayoría relativa, lo que obliga a que sean 13 mujeres y sólo 7 hombres los que ocupen las diputaciones plurinominales propuestas por los partidos políticos. Esto debido al principio constitucional de paridad de género en la integración de la siguiente legislatura para que sea constituida por 25 hombres y 25 mujeres.
El Acuerdo OPLEV/CG052/2021 estableció que “al concluir la asignación de diputaciones, una vez aplicados los límites de sobre y sub-representación, se revisará si algún género se encuentra sobrerrepresentado y, en su caso, el OPLE hará los ajustes correspondientes de las listas de los partidos políticos con los mayores porcentajes de votación, hasta lograr la paridad de los géneros en la integración del Congreso del Estado.
Pero hay un criterio previo, el de evitar la sobre representación legislativa, es decir, que ningún partido tenga más del 8% de diputados respecto al porcentaje de votación obtenido.
De acuerdo con los cómputos finales, de conformidad con el Código Electoral de Veracruz y los lineamientos del Instituto Nacional Electoral (INE), para evitar que los partidos políticos rebasen el límite constitucional del 8 por ciento de sobrerrepresentación, de las 20 diputaciones plurinominales en juego, MORENA sólo obtendría 3; el PAN, 5; el PRI, 3; el PRD, 2; Movimiento Ciudadano, 3; Partido Verde, 2; PT, 1; y Fuerza por México, 1. Y ahí es donde vienen los ajustes a las listas.
Por tanto, MORENA llegaría a la legislatura con un total de 24 diputados por ambos principios; el PAN, 9; el Partido Verde y el PT, 4, respectivamente; el PRI y Movimiento Ciudadano, 3; el PRD, 2 y Fuerza por México, 1. Siendo que Morena y el PAN son los partidos con los mayores porcentajes de votación, serán estos los que vean reflejados este ajuste en sus listas de plurinominales.
Así, Gómez Cazarín sería desahuciado por estos dos criterios: la sobre representación y la paridad de género. A Morena le corresponderán tres espacios por la vía plurinominal, que serían ocupados por Gonzalo Durán Chicoya, registrado como género neutro y representante de la comunidad LGBTTTIQ, e Ilya Dolores Escobar Martínez y Gisela López López. En el caso del Pan pasaría lo mismo, donde el sacrificado sería el actual diputado local Bingen Rementería.
¿Quiénes llegarán finalmente al Congreso? Las apuestas siguen corriendo.
Las del estribo…
- Este lunes, el gobernador Cuitláhuac García decidió encubrir a los policías y agentes ministeriales que allanaron una bodega en Río Blanco. Para él, el hecho no existió porque no hubo denuncia penal ; en su lógica, el video que confirma los hechos, sólo es parte de la “sospechosa” denuncia pública.
- En Veracruz, seis de cada 10 estudiantes que concluyen la preparatoria no cursan la universidad. Dice el Presidente que quienes obtienen títulos universitarios y de Posgrado son los que menos entienden su 4T. Ahora todo tiene sentido.