De razones y pasiones
Rafael Pérez Cárdenas
La jornada electoral concluyó. A nivel nacional y en el estado, los ciudadanos tomaron una decisión que debe ser respetada. Serán ellos y nadie más quienes se beneficien o paguen las consecuencias –de manera individual o colectiva- de la decisión que mayoritariamente tomaron este domingo y que dejó un nuevo escenario político.
A la luz de los resultados, partidos políticos y candidatos empiezan a resentir la resaca del triunfo y la derrota; a muchos el fracaso los tomó por sorpresa. En la víspera del cómputo que habrá de ratificar ganadores y definir aquéllos en los que todavía hay una cerrada competencia, se puede hacer un corte de caja preliminar.
1. Este lunes, el Presidente López Obrador se dijo “feliz, feliz, feliz” por el resultado electoral; sin embargo, por su naturaleza, le fue imposible -en medio de su felicidad- evitar confrontar a los medios que pusieron énfasis en las batallas perdidas por Morena, antes que en triunfos como el de Veracruz.
Lógicamente, para los medios nacionales tuvo mucho mayor impacto que Morena haya perdido más de la mitad de las alcaldías en la Ciudad de México -en lo que históricamente ha sido su principal bastión político y económico- que el resultado que obtuvieron en la aldea jarocha.
El Presidente aseguró que es falso que Morena y sus aliados vayan a perder diputados en el Congreso de la Unión. Sin embargo, de acuerdo al PREP, Morena y sus aliados (PVEM, PT y PES) pasarían de 332 diputados -2 menos de la mayoría calificada- a sólo 281; mientras que los partidos de oposición subirán de 168 diputados a 219 en total. Es matemática simple aunque el Presidente sea tan hábil con los números como lo era Peña Nieto.
El Presidente jamás, en toda su carrera política, ha reconocido haber perdido una elección; no tendría por qué hacerlo ahora.
La realidad es que López Obrador y Morena perdieron la posibilidad de alcanzar la mayoría calificada –necesaria para realizar reformas constitucionales, nombramientos de consejeros del INE y otros organismos autónomos- y tendrán que conformarse con la mayoría simple, que efectivamente, es la que aprueba el presupuesto de egresos. La suya es una verdad a medias.
En este escenario, el gran triunfador de la jornada fue el Instituto Nacional Electoral (INE). Vilipendiado por el Presidente y su partido a lo largo de toda la campaña, demostró que se trata de un organismo profesional, neutral y confiable.
Fin a las monarquías y franquicias familiares
Una de las situaciones tan sorprendentes como positivas fue el hecho de que muy pocas candidatas o candidatos, vinculados familiarmente al presidente o presidenta municipal en funciones, logró alcanzar la victoria, con lo que se rompen los cacicazgos y se pone fin a las monarquías y franquicias familiares.
Siempre he pensado que el vínculo consanguíneo no debe despojarnos de nuestros derechos políticos; aspirar a un cargo de representación popular es uno de ellos. Sin embargo, en México se ha convertido en un manto de impunidad y ventaja electoral que vicia la democracia y corrompe la administración pública al desaparecer por completo la rendición de cuentas.
Así, por ejemplo, Carolina Galván Galván (PRI), hija de la alcaldesa de Xico Gloria Galván Orduña, apenas alcanzó un 33% de la votación frente al candidato de Verde-PT-MORENA, Luis Yoval Maldonado, quien se perfila a ganar con un 40% de las preferencias electorales.
Sucedió también en Zongolica, donde el actual alcalde Juan Carlos Mezhua Campos (PRI) fracasó en su intento de heredar el cargo a su hijo Carlos Irenio Mezhua Amador (PAN-PRI-PRD), quién sólo alcanzó del 38% de los votos frente al 51.14% de su contrincante Benito Aguas Atlahua, de Verde-PT-MORENA.
Lo mismo sucedió en Teocelo. Mara Chama Villa (Verde), la hija del alcalde Mario Chama Díaz –quien en la víspera fue denunciado de estar comprando votos-, perdió con una amplia diferencia de dos a uno frente a Isaac Alberto AnellReyes (PT) quien alcanzó el 46% de la votación.
Y la historia se repitió en Ángel R. Cabada y Chincontepec, donde los alcaldes Arturo Herviz Reyes y Pedro Adrián Martínez Estrada pretendieron imponer, tras varias administraciones encabezadas por sus familias, a su hijo Elvis Arturo Herviz Pérez (PRD-PAN-PRI) y a su padre Manuel Francisco Martínez Martínez, respectivamente. No lo lograron.
Casos similares sucedieron en Córdoba –aunque ahí los hermanos eran adversarios-, Tuxpan, Tecolutla, Huatusco –donde un matrimonio se había heredado el cargo por varias administraciones-, Soledad de Doblado, donde madre e hija iban por el tercer gobierno municipal consecutivo, y Naolinco, entre muchos otros. Mañana daremos cuenta de otros más.
No tardan en conocerse los escándalos de corrupción tras varias administraciones regenteando el cargo.
La del estribo…1. “La votación del domingo sugiere que los mexicanos prefieren el pluralismo y la democracia por sobre el regreso de un caudillo”, publicó ayer del diario TheWall Street Journal. ¡Qué ganas de echarle a perder su momento feliz, feliz, feliz, al Presidente!2. El triunfo contundente de René Tovar a la alcaldía de Cazones –ejecutado en la víspera por un grupo armado- sólo confirmó que su gobierno representaba un riesgo para oscuros intereses. Ojalá y el Gobernador cumpla su promesa de esclarecer el crimen y señalar quienes provocaron tanta violencia política en Veracruz.