El Alto Comisionado de la ONU para Derechos Humanos, Volker Turk, pidió a los legisladores rusos que detengan el proceso de ampliación de la ley anti-LGBTI en el país, que contempla la prohibición de toda comunicación e información sobre «relaciones sexuales no tradicionales».
Según observó Turk, la Duma, el parlamento ruso, adoptó propuestas para ampliar la prohibición de cualquier discusión e intercambio de información sobre personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero, y sus derechos humanos.
El cambio legislativo en curso, «empeoraría la situación ampliando el alcance de la ley hasta una completa prohibición de la comunicación sobre el tema incluso a los adultos. Las propuestas también se enfocan en los derechos de las personas transgénero», remarcó.
La enmienda propuesta ampliarían una ley existente de 2013, que ha sido ampliamente examinada y condenada por expertos en derechos humanos de la ONU como discriminatoria, que viola los derechos fundamentales a la libertad de expresión y conduce a un aumento de la incitación al odio, los delitos de odio y el abuso, incluso contra los niños.
Según Shamdasani dicha ley puede recrudecer la violencia especialmente contra los niños y las mujeres pues estigmatiza y hace blanco de ataques a quienes tienen familiares miembros de dicho colectivo.
Turk, el nuevo Alto Comisionado quien sucede a Michelle Bachelet, en su primera comunicación a la prensa hace un llamado a los legisladores rusos, quienes considerarán las propuestas en otras dos lecturas, para que la rechacen y, en su lugar, deroguen la ley existente y tomen medidas urgentes para prohibir y combatir activamente tanto la discriminación como la violencia basada en la orientación sexual y la identidad de género.
En virtud del proyecto de ley, las personas que difundan propaganda LGBTI que antes era prohibida sólo si se dirigía a menores de edad, podrían recibir multas de entre 815 y 6,520 dólares, mientras que las organizaciones podrían recibir sanciones de hasta 81,500 dólares. Asimismo, los infractores podrían cumplir sanciones en la cárcel, agregó Shamdasani.
El Alto Comisionado también señala que “la exclusión, estigmatización y discriminación de cualquier grupo dentro de una sociedad es corrosiva, es una causa fundamental de la violencia y tiene un impacto negativo en la sociedad en su conjunto’’, concluyó la portavoz.